Pedro Sánchez ha conseguido una vez más lo que parecía imposible en la política vasca. Los dos partidos nacionalistas, PNV y Bildu, que andan a la gresca por casi cualquier motivo, con el penúltimo enfrentamiento por la guerra de Ucrania todavía caliente, sí coinciden en clamar contra el presidente del Gobierno por impedir el "derecho de autodeterminación" del Sáhara.
Tradicionalmente en el País Vasco muchos, fueran nacionalistas o no, han simpatizado con la causa de los saharahuis frente a Marruecos. En el caso de las formaciones soberanistas es obvio que uno de los motivos de ese respaldo es que consideran que en País Vasco también debería ejercitarse el citado derecho de autodeterminación para desligarse del resto de España.
Así, en realidad la postura de PNV y Bildu no resulta sorprendente. Pero sí es relevante. Porque no puede obviarse que los dos partidos vascos son dos de los apoyos necesarios al Gobierno de PSOE y Unidas Podemos que preside Sánchez. Y ambos están de acuerdo en censurar la actitud del jefe del Ejecutivo en relación al Sáhara y también en reclamar una vuelta a la posición estratégica previa.
El referéndum como solución
Además del diagnóstico, los nacionalistas, tan peleados por otros temas, coinciden en la solución que proponen. Porque para los dos socios de Sánchez hay solo un camino al problema del Sáhara: la celebración de un referéndum de autodeterminación. Los portavoces nacionalistas lo están dejando claro desde que se conoció el giro del Gobierno en su política exterior.
El PNV sorprende con su dureza contra Sánchez. Lo acusa de "alinearse plenamente y sin matices con las aspiraciones y ambiciones marroquíes". Y dice que su nueva postura "no es ni creíble, ni realista"
Este martes, sin ir más lejos, la ejecutiva del PNV hacía público un comunicado que llamaba la atención por la dureza en la crítica a Sánchez. Primero los jeltzales tildan la decisión de Sánchez como "cambio radical e histórico de la postura de las autoridades del Ejecutivo español", lo que a su juicio "supone alinearse plenamente y sin matices con las aspiraciones y ambiciones marroquíes de hacerse con la soberanía del Sáhara Occidental y el destino del Pueblo Saharaui".
Asimismo, la ejecutiva peneuvista considera que "nueva posición contraviene gravemente el Derecho Internacional, los principios y valores de la Carta de Naciones Unidas y las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU", recuerda que la ONU ha pedido a España "que haga los esfuerzos necesarios para que las y los saharauis puedan ejercer su derecho a la autodeterminación a través de un referéndum" y concluye que "nueva posición unilateral del Gobierno de España no es ni creíble, ni realista para resolver este conflicto de naturaleza política". Por último, reclaman "respetar el derecho a la libre determinación del pueblo saharaui a través de un referéndum".
La postura de Bildu también es cristalina en esta cuestión. Este mismo martes su portavoz en el Congreso, Mertxe Aizpurua, afirmó que debe ser el propio presidente del Gobierno y “no solo el ministro de Exteriores”, quien comparezca en el Congreso por tomar “una decisión tan terrible” y de “una gravedad tan absoluta” sobre el Sáhara. Además, el portavoz bildutarra en el Senado, Gorka Elejabarrieta, ya acusó a Sánchez de "negar al pueblo saharaui el legítimo derecho a la autodeterminación".
