Sindicatos policiales han exigido este sábado al ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, que traslade más efectivos a Cataluña y que permita a los agentes desplegados el uso de todos los medios antidisturbios, incluido su tanque de agua, para hacer frente a los graves altercados.
En sendos comunicados tanto el Sindicato Unificado de Policía (SUP) como la Unión Federal de Policía (UFP) se muestran muy críticos con la gestión de la situación que está haciendo Interior y la Dirección General del cuerpo porque que están dejando "abandonados a su suerte" a miles de policías.
A esta denuncia se ha sumado también Jupol, el sindicato policial que en las recientes elecciones obtuvo una mayoría de representantes y que esta mañana se ha concentrado en Madrid convocado por Jusapol, la asociación de la que nació y que integra a policías nacionales y guardias civiles, para demandar que sus sueldos sean equiparados al de los mossos.
Las tres organizaciones demandan más medios humanos y el empleo de todos los recursos disponibles, incluido el uso de la tanqueta de agua del cuerpo que se encuentra en Barcelona.
207 heridos
Según el SUP, desde que comenzaron los altercados violentos en Cataluña hace cinco días, 207 policías y mossos han resultado heridos, siete de ellos con lesiones de entidad, además de que 110 vehículos policiales han resultado dañados como consecuencia de la "lluvia de piedras y objetos contundentes".
"Exigimos una reunión urgente con Marlaska. Creemos que el dispositivo desplegado debe ser completado de inmediato con cuantos efectivos sean necesarios", subraya el SUP en un comunicado en el que reitera la necesidad de emplear todos los medios de orden público de los que dispone la Policía Nacional para "sacar de las calles a los violentos".
Con dureza se expresa también la UFP que denuncia "una total falta de planificación operativa" por parte de los responsables policiales, concretamente de su número dos, el director adjunto operativo (DAO), José Ángel González, que "parece que ha decidido aliarse con la tesis del Gobierno de no hacer nada" y del que piden su cese.
La UFP señala que los efectivos actuales carecen de material antidisturbios suficiente y que no hay previsión de relevos, lo que se traduce en jornadas de veinte horas de "muy alta tensión y estrés".
Desde Jupol, su secretario general, José María García, advierte también de la situación que están viviendo los policías ante un movimiento de violentos "muy estructurado" que anoche mantuvo en las calles "ocho horas de guerrilla urbana".
En opinión de García, no se puede permitir en este escenario mantener "parados y sin dejar actuar" a los guardias civiles desplazados.