El líder de Podemos, Pablo Iglesias, aprovechó su intervención ante el Consejo Ciudadano Estatal -el máximo órgano del partido entre asambleas- para dirigir sus elogios hacia la protesta que miles de mujeres llevaron a las calles este jueves.
El secretario general del partido morado ha convocado para este lunes una reunión del consejo de sabios llamado "Rumbo 2020", una especie de 'gobierno en la sombra', con el fin de analizar de forma pormenorizada lo que el líder de Podemos calificó como la "revolución de las mujeres".
Según expuso Iglesias, la movilización sin precedentes del 8-M indica el rumbo para un cambio político y ha consolidado un "patriotismo de los delantales" frente al "patriotismo de las banderas" que representó la crisis catalana.
De hecho, también destacó la reciente protesta en las calles de miles de pensionistas. En definitiva, dijo Iglesias, ha comenzado ya una "primavera de las movilizaciones" que se pondrá de manifiesto con diferentes reivindicaciones sociales en los próximos meses. Desde la renta básica, hasta la marea blanca, pasando por la lucha contra los paraísos fiscales.
El rumbo marcado por Iglesias para la etapa que se abrió tras su fiasco en Cataluña y el "agotamiento del proces" pasa por situarse "al lado" de los movimientos sociales. Tenemos que contribuir desde la modestia a ayudar y a empujar", dijo. ""El eje social se ha vuelto a hacer hueco y ha salido a las calles a expresar el malestar acumulado (...) Cuando las banderas bajan, la realidad y los problemas estructurales aparecen porque nunca dejaron de estar ahí", añadió.
Entre los miembros del denominado 'gobierno en la sombra' convocado este lunes están el economista Vicenç Navarro o el cofundador del partido Juan Carlos Monedero. También destacados dirigentes de la formación morada que en anteriores reuniones han compartido espacio con miembros de fuerzas aliadas, como En Comú, En Marea o Izquierda Unida.
La cúpula del partido morado y los líderes territoriales se reunieron este sábado en Madrid para diseñar las líneas maestras de su estrategia electoral para las elecciones municipales, autonómicas y europeas que se celebrarán en 2019. La cuestión del nombre fue el asunto más destacado. Iglesias dejó en manos de los inscritos su voluntad de que las siglas del partido aparezcan -salvo excepciones- en las candidaturas y confluencias. La líder en Andalucía, Teresa Rodríguez, mostró su disconformidad con la voluntad de Iglesias.
