En 2016, Pedro Sánchez proponía un código ético para los parlamentarios socialistas que tenía como primera medida "la renuncia al ejercicio profesional de actividades privadas" y la garantía de que "aquellas que eventualmente puedan ser autorizadas no reportará al representante ningún tipo de asignación económica o retribución". Ocho años después -¿cambio de opinión mediante?-, Sánchez ha ganado como mínimo 60.000 euros con sus contratos editoriales. La cuantía total es superior, pero no se puede conocer porque el presidente se niega a hacer pública su declaración de actividades, como ha podido constatar Vozpópuli. A una parte de estos beneficios privados del presidente hemos contribuido todos los españoles, ya que se utilizaron recursos públicos para promocionar 'Tierra firme', como adelantó en exclusiva este periódico.
Desde que Sánchez fue elegido presidente del Gobierno el 16 de noviembre de 2023, y la ley de altos cargos establece que dispone desde ese día de un plazo de 3 meses para presentar su declaración de bienes e intereses. Un plazo que llegó a su fin el 16 de febrero de 2024. Este medio solicitó un mes después a la Oficina de Conflictos de Intereses esta declaración de bienes sin obtener respuesta. En consecuencia, Vozpópuli ha registrado una reclamación al Consejo de Transparencia.
Los tres años ocultos de Sánchez
El presidente del Gobierno oculta los rendimientos obtenidos por su actividad privada en tres ejercicios fiscales: 2019, 2020 y 2021. Las ganancias de Sánchez estos años vienen reflejadas en la declaración de actividades del presidente presentada a comienzos de este nuevo mandato, donde se recogerá también lo que ha ganado con su actividad editorial.
El contrato firmado por Manual de Resistencia le reportó, solo en 2019, unos ingresos en concepto de derechos de autor de 16.666 euros. Un dato que aparecía en la declaración de bienes que Sánchez hizo pública en la web del PSOE aquel año. Declaración que, por cierto, ha sido borrada posteriormente, aunque este medio logró rescatar.
Tras dos años negros en los que el presidente oculta su declaración, reporta en 2022 ingresos de 42.000 euros por su actividad literaria. Esta información se extrae de la declaración compartida con el Congreso de los Diputados en julio de 2023.
En esta declaración, que no fue publicada en el BOE hasta el 30 de marzo de 2024, constan 55.205,57 € en concepto de “demás bienes y derechos de contenido económico”. Una cifra que se correspondería a los mencionados 42.000 euros por derechos de autor del año 2022 más lo que percibe de rentas por una vivienda alquilada (12.645 euros).
El organismo público en defensa de Sánchez
La Oficina de Conflictos de Intereses ya actuó en defensa de los intereses de Sánchez cuando, como publicó este periódico, reconoció que no había hecho las comprobaciones oportunas para ver si el presidente está dado de alta en la Seguridad Social como autónomo.
La publicación de libros es una actividad profesional sujeta a un contrato mercantil que implica al beneficiario estar dado de alta como autónomo. Según la Seguridad Social, "los escritores de libros" deben estar incluidos en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Tampoco libraría a Sánchez de esta obligación haber recurrido a los servicios de Irene Lozano para redactar el libro. El INSS señala como autónoma a "aquel que realiza de forma habitual, personal y directa una actividad económica a título lucrativo, sin sujeción por ella a contrato de trabajo y aunque utilice el servicio remunerado de otras personas”.
Aun así, la Oficina de Conflictos de Intereses afirmó que "no considera ni necesario ni oportuno dirigir consulta alguna a la Tesorería General de la Seguridad Social en relación a la actividad creadora del Presidente del Gobierno".
Un contrato editorial escondido
La Secretaría General de la Presidencia del Gobierno inadmitió a trámite la solicitud de información de este periódico sobre el contrato editorial de Sánchez con el Grupo Planeta y del presidente con Irene Lozano, en calidad de redactora. En aquella ocasión, la Oficina de Conflictos de Intereses -recordemos que depende del Ministerio de José Luis Escrivá- volvió a salir en defensa de Sánchez aduciendo que no solo está avalado legalmente para publicar libros mientras es presidente del Gobierno pudiendo, sino que también puede "obtener beneficios derivados de dicha publicación".
Lo que los expertos juristas consultados por este periódico señalan es que utilizar dinero público para promocionar un acto que repercute en beneficios económicos privados podría ser incluso constitutivos de los delitos de prevaricación y malversación si así lo considerase un juez.
En resumen, el presidente del Gobierno no solo utiliza recursos públicos para promocionar su libro, sino que oculta públicamente cuánto dinero le ha reportado esta actividad.
xaxonem
A ver si nos damos por enterados, Sánchez es un delincuente profesional.
mesnadero
Ni regalados los pondría en mi biblioteca. No merecen el espacio que ocuparan y las dioptrías que gastaría para leerlos. Buenos días.
Discobolo-60
Posiblemente su queridísimo hermano haya aprendido del personaje y por eso defrauda al Fisco. " De tal palo tal astilla ". Y posiblemente la Bego haya aprendido de él. " Dos que en la misma cama se acuestan se levantan de la misma condición ". Menudo Golfo, como para fiarse de él.
Oberheim
Puntualicemos, los escritores deben estar inscritos en autónomos si es su actividad principal, al ser una actividad ocasional no está obligado a ello, pero sí a facturar y declarar los ingresos que se deriven de dicha actividad ocasional.
paulino
"Si no se habla de mi libro, me voy"....