El PSOE negocia con sus aliados independentistas que el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, releve a Meritxell Batet al frente del Congreso de los Diputados, según explican a este diario hasta tres fuentes socialistas con peso dentro del partido. La renuncia de la política del PSC, 'decretada' por el presidente del Gobierno según fuentes conocedoras de las negociaciones para la conformación de la Mesa de la Cámara, es el primer gesto de Pedro Sánchez para satisfacer a sus socios y allanar su investidura.
No obstante, los nombres de la exvicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo y del hasta ahora portavoz en el Congreso, Patxi López, también están sobre la mesa, según estas mismas fuentes. El entorno de Bolaños no entra a valorar lo que considera mera "rumorología". Pero en el PSOE se ve el cambio de puesto como el paso lógico. Sánchez sabe que el ministro de Presidencia tiene callo negociador y, por eso, está siendo una de las voces para conversar con Junts junto al PSC.
Mientras, se suceden los contactos entre el PSOE y el resto de socios para acordar la composición de la Mesa. Ferraz está dispuesto a dar un puesto a la amalgama de la coalición tras remarcar que la presidencia -tercera institución del Estado- no está en cuestión pese al ruido de Sumar que no descartó que fuera algún socio de la coalición. Pero las fuentes consultadas en el Partido Socialista son claras y esperan que sean el PNV, ERC, Junts, Bildu y BNG quienes cierren un acuerdo sobre el diputado que se sentará en uno de los cinco sillones que aspira a retener la mayoría de izquierdas en el órgano de gobierno de la Cámara.
La repesca de Bolaños
Lo cierto es que el presidente del Gobierno ha repescado al titular de Presidencia en esta fase poselectoral. Cabe recordar que el líder del PSOE castigó a Félix Bolaños tras el incidente de la fiesta institucional del 2 de mayo, cuando intentó colarse en la tribuna de autoridades sin invitación previa. En Moncloa lamentaron la torpeza de Bolaños, porque solo sirvió para inflar a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, en plena precampaña de las elecciones municipales y autonómicas del 28-M en las que el PP arrasó. Aquella pasada de frenada, como algunos socilistas recuerdan el incidente, le supuso el ostracismo.
Desde entonces, Bolaños perdió peso. No solo dentro del Gobierno, sino durante las dos campañas electorales consecutivas, en las que apenas tuvo actos. Es más, no le quedó más remedio que salir del foco tras estallar el escándalo de supuesta compra de votos del PSOE en Mojácar (Almería), porque apareció por redes un vídeo de una intervención suya en aquella agrupación junto al cabecilla de la trama.
Bolaños llegó al Gobierno de Sánchez en junio de 2018 como secretario general de la Presidencia del Gobierno. En enero de 2020, tras conformarse la coalición entre PSOE y Unidas Podemos, fue ratificado en el mismo puesto. Es más, fue el encargado de preparar las estructuras de los ministerios del primer Gobierno de coalición de España en ocho décadas. Bolaños también ha pilotado las conversaciones para la renovación de altas instituciones del Estado, como el Consejo General del Poder Judicial, el Tribunal de Cuentas, el Defensor del Pueblo, el Tribunal Constitucional y la Agencia Española de Protección de Datos.
La carrera del ministro
Bolaños tiene en su haber de logros el acuerdo para la renovación del Consejo de Administración de Radio Televisión Española. Pero también tiene pendiente la renovación del Poder Judicial. También participó, junto al entonces ministro de Justicia Juan Carlos Campo, en la redacción de los indultos a los nueve líderes del procés con los que el presidente del Gobierno intentó tender puentes con el Gobierno catalán para desinflamar el "conflicto político".
En julio de 2021, Sánchez hizo una remodelación sin precedentes de su Ejecutivo. Y ahí Bolaños sustituyó a la vicepresidenta Carmen Calvo al frente del Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática. Precisamente Calvo, una de las sondeadas por Sánchez para ocupar el sitio de Batet, tiene más problemas, porque como recuerda una fuente del PSOE, "salió muy quemada de su relación con Podemos".
No obstante, en el PSOE saben que las alianzas de Sánchez con los partidos independentistas y separatistas no le han hecho daño. Más bien al revés, en Ferraz se cuelgan la medalla por haber reducido el voto nacionalista e independentista a su mínima expresión en décadas gracias a los trasvases que llevaron al PSC en Cataluña y al PSE-EE en el País Vasco a ganar las elecciones.
Peperra
Dios mío, si Batet era sectaria, lo de Bolaños no tiene nombre…en mi opinión sería un desastre, que horror!!
Pepepelotas
No me lo puedo creer, ¿Pero no tienen a un tipejo mas ruin, mentiroso, rencoroso y radical? a que quiere ser presidente. Vaya ojo que tiene el Sultan de la Mareta para seleccionar perfiles
Bartleby
¿Bolaños, en serio?, esto es el despepite. Un tipo que tiene su honorabilidad por los suelos y pisoteada por su servilismo perruno al amo, anda que.
Pelosi
Sectaria ojerosa y arrogante por petimetre sectario capaz de todo, fair enough! Hace falta un hombre para dirigir el Congreso en esta legislatura porque si en la pasada se nos heló la sangre con las cosas que se hicieron y las mentiras que se profirieron, en la próxima vamos a llegar al éxtasis.
Smiley65
Toda una declaración de principios. El más sectario para el puesto más institucional. Eso (entre otras cosas) es el sanchismo, Pedro.
NormaDin
Los tontetes están de moda.