El Gobierno trata de recuperar el choque "ideológico" con Vox para intentar arrinconar al PP y dar la vuelta a unas encuestas muy adversas para el PSOE, según explican diversas fuentes a Vozpópuli. El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha lanzado a su partido a una ofensiva contra Pablo Casado para recuperar el terreno perdido tras los indultos. Y esos ataques, centrados en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), pasan también por recolocar al partido de Santiago Abascal en el centro de la confrontación política. "Es lo que mejor ha funcionado a Sánchez", dicen estas fuentes.
PSOE y Gobierno han ejecutado una coreografía perfectamente organizada en cuanto a los delitos de odio. El portavoz adjunto del Grupo Socialista en el Congreso, Felipe Sicilia, ha acusado a Vox de "apuntar" con sus discursos hacia colectivos vulnerables como los migrantes para responsabilizarles de las agresiones homófobas. Poco después, se ha anunciado que Sánchez presidirá una comisión de seguimiento sobre los delitos de odio que se reunió hace poco más de un mes.
"La extrema derecha apunta a quién hay quien mirar y algunos pasan de la mirada a los hechos que suponen agresiones", ha dicho Sicilia en alusión a un ataque homófobo cometido por ocho personas en Madrid.
La pinza PSOE-Vox
Abascal ha condenado esta agresión. Pero ha lamentado que "el consenso progre y sus lacayos mediáticos" silencian muchas veces estos casos para "no hablar del origen de los agresores". "El pin parental, la inmigración, el colectivo LGTBI son debates que alientan la pinza PSOE-Vox", aseguran estas fuentes. "Y es lo que peor ha venido al PP en todo este tiempo".
Casado se ha sacudido la presión de esa pinza desde su discurso en la fallida moción de censura de Abascal. La contundente victoria del PP en la Comunidad de Madrid y el peaje de los indultos pagado por Sánchez para sostener la legislatura han dado un vuelco a las encuestas, que favorecen ahora a los populares.
Sánchez busca frenar esa sangría. Y lo está intentado con la amplia remodelación de su Gobierno en julio. Y ahora presionando al PP con la renovación del CGPJ. La portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, ha aprovechado la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros para exigir a Casado que cese en sus "excusas" y negocie los cambios en el Poder Judicial y las otras instituciones del Estado.
La tercera vía de Sánchez es recuperar la "confrontación" con Vox. Rodríguez ha anunciado que el presidente encabezará el viernes una reunión extraordinaria de la Comisión de seguimiento del plan de lucha contra los delitos de odio. Este grupo, que depende del Ministerio del Interior, se reunió por última vez el 28 de julio. Rodríguez no ha querido culpabilizar a nadie, pero ha dicho que el presidente quiere estar encima ante la alarma que provocan algunos incidentes.
"La determinación del Gobierno es no tolerar ningún tipo de discurso que aliente a este tipo de agresiones y a este tipo de delitos", ha dicho Rodríguez. "Ese es el compromiso del Gobierno y eso será de lo que hablemos el próximo viernes".
Los delitos de odios crecen
Las estadísticas que el Ministerio del Interior presentó en julio reflejan que, en los seis primeros meses de este año, Policía y Guardia Civil ha recibido 610 denuncias por infracciones de este tipo, un 9,3% más que en el mismo periodo en 2019, cuando se contabilizaron 558 sucesos. El 2020 hubo un descenso significativo de estos delitos y los de todo tipo debido al confinamiento por el coronavirus. Los tres ámbitos más comunes del odio son el racismo-xenofobia, la ideología y la orientación sexual.
El PSOE y Vox han confrontado habitualmente en este ámbito, y Sánchez suele utilizarlo para atacar también al PP por "connivencia" con Abascal. En la campaña electoral del 4 de mayo en la Comunidad de Madrid, los socialistas denunciaron a Vox por un polémico cartel sobre los menas (menores no acompañados). El juez acabó archivando esta denuncia por supuesta criminalización de los menores.
En julio del año pasado, el PSOE también impulsó una proposición no de ley para combatir los delitos de odio contra el colectivo LGTBI. La iniciativa instaba al Gobierno a "impulsar campañas de sensibilización" y "la formación en materia de diversidad sexual" de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, entre otras sugerencias.