La tumba del dirigente socialista asesinado por ETA en 2000 Fernando Buesa ha aparecido atacada con pintura negra, un día después de que fuera saboteado el monolito en memoria de Buesa y de su escolta Jorge Díaz en Vitoria, según ha denunciado en sus redes sociales la teniente de alcalde de Vitoria, Beatriz Artolazabal.
Hace tres años, la tumba de Buesa ya fue objeto de otro ataque.
La teniente de alcalde ha lamentado este "nuevo ataque a la memoria de Fernando Buesa", ante el que ha mostrado su "más absoluta condena y solidaridad". "No es casualidad. Este no es el camino para la convivencia", ha subrayado Artolazabal, que acompaña su denuncia con una imagen de las instalaciones en el cementerio.
Este pasado jueves, el monolito levantado en Vitoria en memoria de Buesa y de su escolta Jorge Díez fue también atacado con pintura negra, al parecer mediante el empleo de un aerosol.