El despido de Antonio Caño del Grupo Prisa ha levantado mar gruesa en la redacción de El País, la cual dirigió entre 2014 y 2018. El afectado difundió un mensaje en Twitter tras recibir la noticia sobre la ruptura de su contrato en el que calificaba la medida como un "atropello a la libertad de expresión". Este viernes, el Comité de Redacción del rotativo le ha contestado con un comunicado en el que le acusa de haber puesto trabas a la libertad de información durante su mandato.
El comunicado surge después de que el Comité recibiera "numerosas quejas de compañeros ofendidos y molestos" por las declaraciones de Caño y en respuesta a las explicaciones "auto-exculpatorias" que ofreció el periodista en sus redes sociales, en las que citaba razones ideológicas para referirse a su despido.
El órgano interno recuerda que este periodista tuvo una actitud censora mientras fue director de El País. "El listado de profesionales que decidieron marcharse por la censura constante de sus artículos, o incómodos por la necesidad de seguir al pie de la letra sus consignas, es amplio", así como el de "represaliados que debieron dejar las materias sobre las que informaban, y los despedidos por censuras insostenibles", expone el comunicado interno, al que ha tenido acceso Vozpópuli.
En el mensaje, el Comité recuerda que Caño intentó prohibir la celebración de una consulta interna que se quería convocar para pedir opinión a los profesionales del diario sobre su situación profesional y la salud del proyecto.
Pese a todo -recuerda-, la encuesta se realizó y en sus resultados se comprobó que la opinión de los periodistas sobre su director no era buena, dado que fue evaluado con 2,14 puntos sobre 10. "En la pregunta sobre qué es lo que más te molesta de la Redacción aparecieron en los primeros lugares, por primera vez en las encuestas realizadas hasta el momento, las palabras 'autoritarismo' y 'sectarismo'", recuerda el texto.
Y añade: "Los ecos de aquella época llegaron hasta The New York Times y uno de los textos censurados terminó publicándose en el Times londinense".
El despido de Antonio Caño
Hay que recordar que Antonio Caño fue despedido el pasado miércoles por causas organizativas y económicas, después de casi cuatro décadas en el rotativo. El periodista ejercía su puesto desde Estados Unidos y mantenía un contrato de asesor digital con el grupo.
Pocos minutos después de que se produjera la noticia de su despido, se pronunciaba al respecto: "Sobra mencionar la incomprensión y el dolor que siento ante una decisión que interrumpe, por teléfono, de forma fulminante y sin posibilidad siquiera de un intercambio de puntos de vista con los responsables del periódico".
El exdirector de la cabecera generalista de Prisa explicaba que el despido se produce después de varios incidentes con la dirección del periódico relacionados con el contenido de la tribuna de opinión mensual que tenía en el rotativo.
Asimismo, añadía: "Como mi trabajo durante tantos años siempre ha merecido los elogios de la empresa, a la que agradezco haber premiado ese trabajo con continuos ascensos hasta otorgarme la máxima responsabilidad del diario, sólo puedo entender que mis problemas en los últimos tres años -que se iniciaron con el despido de todos mis colaboradores tras mi sustitución en la dirección- están derivados de la situación política española y de la opinión que, libremente, como he hecho siempre, expongo en mis artículos".
Por lo tanto -añadía- "considero que este despido es un despido por razones ideológicas, ilegal y sin precedentes en la historia de Prisa. Durante mi etapa como director, todos los anteriores directores tuvieron libertad plena para expresar sus opiniones en artículos y columnas".