Algunos de los principales clientes de Mediapro sabían desde el pasado mayo que a Jaume Roures le quedaban pocos meses al frente de la compañía. El polémico empresario -explican- no estaba de acuerdo con el proyecto de reestructuración del grupo que había planteado el accionista mayoritario -el chino Southwind Media, con el 80% de las participaciones- y eso había comprometido su continuidad como directivo. Este mensaje rondaba por los círculos empresariales y deportivos españoles desde hace meses.
En realidad, Roures perdió hace un tiempo una parte del poder en su empresa. Sucedió en 2018, cuando el grupo inversor chino Orient Hontai adquirió una participación mayoritaria de Mediapro a partir de la compra del 23,5%, que estaban en manos de Torreal; del 19%, de Televisa 19%; y del 12% de Gerad Romy.
Roures y Tatxo Benet conservaron el 12% de los títulos que poseía cada uno y se mantuvieron al frente de la gestión de la compañía, pero a partir de entonces con un socio con mucho más relevante en el Consejo de Administración. Es decir, con más peso en la toma de decisiones y la posibilidad de decir la última palabra.
En 2021, en mitad de las turbulencias ocasionadas por la covid-19, los chinos realizaron otra inversión multimillonaria en el grupo, hasta situar su participación en el 80% del total. Fueron 900 millones de euros los que 'gastaron' entre ambas operaciones. En otras palabras: realizaron la mayor inversión mediática en España en los últimos años, incluso superior a la que derivó en la compra de Digital Plus por parte de Telefónica.
Lo que ocurre es que la situación económica de este conglomerado empresarial -con sede en Barcelona y 7.000 empleados en el mundo- es delicada y eso comprometía la inversión de los asiáticos. Hace algo más de un año, Mediapro tuvo que renegociar sus créditos con la banca para poder afrontar sus obligaciones, que entonces eran de alrededor de 900 millones de euros.
Vista esta situación -detallan fuentes del grupo-, los socios mayoritarios comenzaron a presionar para realizar una reestructuración en Mediapro con la que Roures habría mostrado su disconformidad. Por eso, el Consejo de Administración de la compañía decidía hace unas horas su despido. A partir de ahora, está por ver qué cantidad de la millonaria "prestación post-empleo" a la que hace referencia el último informe de cuentas de Mediapro -de 9 millones de euros- le corresponde a Roures. Cabe recordar que su gran rival en Madrid, Juan Luis Cebrián, se llevó un bonus de 6 millones cuando abandonó Prisa.
Una nueva etapa
Como consejero delegado y presidente del grupo quedará Tatxo Benet, es decir, el socio inseparable de Roures durante las últimas tres décadas y con quien ha emprendido todo tipo de negocios tanto dentro como fuera del perímetro de Mediapro. Ahora bien, las fuentes del mercado consultadas por Vozpópuli consideran que la 'regencia' de Benet será temporal, dado que la lógica invita a pensar que Southwind Media (entidad dependiente de Orient Hontai, con sede en Hong Kong) tratará de situar los peones en el alto mando del grupo o -como adelantaba Reuters hace unos días- explorará una venta de sus acciones. Seguramente, posterior a la reestructuración del grupo, detallan estos informantes.
Esta situación deja en el alero a algunos rostros históricos de Mediapro, como el influyente ejecutivo Juan Ruiz de Gauna, director general con relaciones fluidas con varios partidos en España y con los principales grupos audiovisuales. De Gauna ha negociado algunos contratos muy relevantes en la historia de la compañía, a iniciativa del dúo conformado por Roures y Benet.
Dentro del alto mando de la compañía también figuran nombres como los de Eva Abans, directora financiera; Josep Ensesa, Legal Officer; José Luis Rubio, director de Broadcast and Media Services; Laura Fernández Espeso, directora de The Mediapro Studio; Carmen Fernández Tallón, directora de Innovación, o Carme Anglada, directora de Comunicación. Incluso puede situarse el de Miguel Cardenal, quien fuera director del Consejo Superior de Deportes y que ha ejercido de importante lobbista en Mediapro desde su incorporación.
Una multinacional
Hay que recordar que el grupo está presente en los cinco continentes y su negocio se sostiene sobre varias patas. Incluye desde la producción cinematográfica y audiovisual hasta la explotación de derechos deportivos o la gestión de museos de clubes.
El fútbol fue el que lo hizo crecer -y las alianzas entre Roures y TV3 lo explican en parte- y también el que lo situó al borde de la insolvencia durante la guerra que mantuvo Mediapro con Prisa. Y este deporte también fue el que provocó que uno de sus trabajadores en Estados Unidos estuviera salpicado por el escándalo de sobornos de la FIFA, del que Roures y sus socios siempre sostuvieron que no sabían nada.
¿Qué será del empresario trotskista a partir de ahora? Fuera de Mediapro, mantiene diversos negocios junto a socios como Benet, que agrupan desde la hostelería hasta los medios de comunicación. De hecho, una de las sociedades en las que participa es la editora del diario Público.
Su empresa Orpheus Media fue la responsable de una de las 'palancas' financieras que activó el F.C. Barcelona en 2022 para poder inscribir a sus fichajes en el campeonato liguero. Una mera búsqueda del nombre y el apellido del hasta ahora líder de Mediapro permite comprobar el entramado de sociedades de las que forma parte. De hecho, la empresa sobre la que se fundó Canal R(e)d, de Pablo Iglesias, estuvo participada por Roures y por su hija, Teia.
¿Se retirará Roures a los 73 años? Algunos de los empresarios con los que más acuerdos ha llegado en los últimos años dudan que el magnate catalán pase a un segundo plano tras su marcha de Mediapro. De hecho, auguran que se 'reconvertirá' en otra cosa para continuar en primera línea.
Fuentes oficiales de Mediapro han emitido un comunicado este viernes para explicar la marcha de Roures -el cese, en realidad- de la compañía. En el texto, han valorado el alineamiento de Southwind Media y WPP con los objetivos marcados por el grupo y la confianza que han prestado a su equipo gestor, encabezado a partir de ahora por Benet.
Thabis
Ea! Pues vete ya por ahí. Vete para el cielo, que nosotros nos quedamos en la gloria.
Maurizio111
¡¡Qué tío más feísimo!!
Stephen Dedalus
Es tal la "pasión" de algunos por Ayuso que pronto compararán su nefasta oratoria con la de Castelar.