Motor

Los concesionarios de coches facturaron en 2018 un 10% más hasta los 46.000 millones de euros

La distribución y reparación de vehículos en los concesionarios españoles facturó el año pasado 3.200 millones de euros más que en 2017 sólo en vehículos nuevos

  • Las ventas de vehículos nuevos superaron los 35.000 millones, con un valor medio por coche de 27.090 euros.

La distribución y reparación de vehículos en España facturó el año pasado 46.240 millones de euros, lo que representa el 3,2 % del PIB nacional, según datos de la consultora MSI con cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE) recogidos en el 'Libro blanco de la distribución oficial 2018' de Faconauto. De ese total, casi 35.000 millones de euros correspondieron a la venta de coches nuevos (el 74,5%), 6.810 millones a la de usados (14,7%) y 4.963 millones a los trabajos de posventa y talleres (10,7%), ha detallado la patronal de los concesionarios Faconauto durante la celebración de su congreso anual en el recinto ferial Ifema.

El incremento en la facturación por la venta de vehículos nuevos respecto a 2017, cuando la cifra se situó en unos 32.000 millones, fue de casi un 10%, lo que supone que los concesionarios vendieron el año pasado de media 573 vehículos, con una tarifa media efectiva de 27.090 euros y un descuento de 4.380 euros respecto a las tarifas oficiales, con lo que el esfuerzo total promocional alcanzó los 5.573 millones de euros. Según el Libro Blanco, el sector de la distribución de vehículos emplea de manera directa a más de 160.000 personas en las casi 5.900 instalaciones de venta y posventa pertenecientes a 2.219 concesionarios, que cuentan con 4.530 talleres.

Con todos los datos recogidos de este último año, el sector maneja unas previsiones poco optimistas en cuanto al envejecimiento del parque automovilístico, que señalan que para el año 2025 la antigüedad media de los coches que circularán por las carreteras españolas será de 13,7 años frente a los 12,5 actuales. Para Faconauto, estos datos obligan a poner en marcha un plan ambicioso y sostenible en el tiempo de saneamiento del parque que no excluya ninguna tecnología.

"No podemos permitirnos el lujo de desechar ninguna tecnología para renovarlo, teniendo como horizonte, claro está, la descarbonización de la movilidad", ha apuntado el presidente de Faconauto, Gerardo Pérez, durante la inauguración del XXVIII "Congreso y Expo". En su opinión, la apuesta por todas las tecnologías permitiría que cualquier ciudadano pueda acceder a una movilidad "más segura y eficiente independientemente de su nivel de renta".

Ejemplo vasco

Así, se ha referido al anuncio del Gobierno vasco con su plan de renovación del parque que prevé ayudas para incentivar la compra de vehículos nuevos a cambio de retirar de la circulación los modelos de más de 10 años y ha señalado que ese camino es el que tienen que seguir otras Administraciones, especialmente la central.

Según Pérez, la demanda de coches nuevos ha tocado techo en 2018 con más de 1,5 millones de turismos y vehículos comerciales, una cifra que se mantendrá este año y que posiblemente se irá reduciendo para estabilizarse a partir de 2025 en unas ventas anuales ligeramente por debajo de esos 1,5 millones alcanzados el pasado ejercicio.

Las transacciones de vehículos usados, por su parte, seguirán creciendo en los próximos años hasta rozar los tres millones de unidades, lo que elevaría la tasa de vehículo usado frente a nuevo en 2 a 1. Además, según el 'Libro blanco', el coche eléctrico, autónomo, conectado y compartido impulsará una profunda transformación de la distribución, que será amortiguada por la inercia que supone la renovación de un parque circulante de más de 27 millones de vehículos.

Los coches, que serán necesariamente más caros, supondrá que de una posición deflacionista del automóvil, que históricamente ha sido un 1% más barato cada año a igualdad de prestaciones, se pasará a una inflacionista, un 1% más caro cada año, al menos hasta 2025.

La facturación de los concesionarios en el año 2025 podría llegar a los 53.548 millones si se implementa un plan sistemático de achatarramiento de los vehículos más contaminantes y peligrosos y se quedaría en 50.478 millones en la hipótesis base; en la estructura de negocio, perderá peso la venta de coches nuevos en detrimento del coche usado y el mantenimiento de los vehículos.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli