Acudió el sociólogo portugués Boaventura de Sousa Santos un buen día a su centro de trabajo y allí encontró unas pintadas que afirmaban: “Bouaventura, violador” y “fuera Bouaventura, todos sabemos”. Los días normales suelen alterarse por cosas más mundanas: una avería en casa, una consulta médica, un atasco, una hora extra... Esa jornada, un señor de más de 70 años comprobó que varios grafitis le acusaban de algo muy serio.
Esos hechos movilizaron a la comunidad universitaria, que inició una serie de pesquisas en las que nadie pudo demostrar nada en contra del profesor. Pero la polémica no acabó ahí. Casi un lustro después de aquello, tres investigadoras publicaron un artículo que se titulaba Las paredes hablaban cuando nadie lo hacía, en el que describían situaciones de acoso en el trabajo sin dar nombres, pero ofreciendo pistas de por dónde podían ir los tiros. Es decir, señalando indirectamente a De Sousa, según revelaba hace unos días el diario El País.
Después de que viera la luz este artículo, la diputada estatal brasileña de Minas Gerais, Bella Gonçalves, concedió una entrevista en la que revelaba que el sociólogo se la insinuó en su día: "Me dijo que estar cerca de él me daría muchas ventajas en el medio académico”. Posteriormente, la activista mapuche Maira Millán aseguró a un medio de comunicación que durante una visita a Coimbra –donde se encontraba el instituto de investigación de De Sousa- fue víctima de una situación de acoso.
Ninguna de estas dos mujeres ofreció pruebas sobre los gravísimos hechos que habían denunciado, que han provocado, entre otras cosas, que Bouaventura haya sido desposeído de los cargos eméritos que conservaba en el Centro de Estudios Sociales. ¿Es cierto lo que cuentan? Es difícil saberlo sin haber sido testigo de los hechos. En estos casos, puede haber un porcentaje muy elevado de verdad o todo puede ser una campaña de difamación. Sea como sea, lo suyo es que quien presente la acusación la acompañe de pruebas. De lo contrario, todo debería ser tomado con prudencia. O con desconfianza.
Porque, de lo contrario, sería muy sencillo que algún enemigo suyo, querido lector, ajustara cuentas con usted de forma directa o indirecta. Las cazas de brujas no suelen iniciarse con una verdad. La verdad suele caminar en paralelo a la justicia. En esos casos, comienzan con difamaciones y exageraciones.
La respuesta del sociólogo
El sociólogo señalado por esas mujeres se ha defendido con un artículo –difundido por la publicación El viejo topo- en el que se refiere exclusivamente a Maira Millán, quien le acusó de abalanzarse sobre ella con intenciones sexuales durante su asistencia a un acto académico en Coímbra.
¿Qué ocurrió? Según la versión que ha publicado De Sousa, la propia Millán le escribió en un correo electrónico en 2010 para ofrecerse a realizar una actividad en la universidad de la citada ciudad. Dado que el profesor no recordaba quién era, consultó con una compañera de profesión, que le recordó quién era la activista. Una vez hecha esta comprobación, el sociólogo escribió a Millán para transmitirle en el interés en que visitara el centro educativo para impartir una conferencia. También se ofreció a pagar los trenes desde Lisboa hasta Coímbra, el hotel y una cena.
La mujer denunció que el investigador le preparó una encerrona: “El lugar que eligió era un restaurante de su familia e hizo abrirlo para que cenáramos los dos solos. Comenzó a beber mucho y a decir cosas desubicadas para 'coquetear'” (…) “Cuando terminamos de cenar, me dijo que quería regalarme unos libros y le pedí que me los diera al día siguiente. Él me dijo que no y que su casa estaba muy cerca. Accedí (…). Entramos en el apartamento, se puso cómodo y comenzó a beber whisky. Me quise ir, pero me pidió que me sentara. Lo hice, pero frente a él. Al hacerlo, él se abalanza sobre mí y comenzó a manosearme, a querer besarme y yo le empujé e indignada le dije '¡No!'”.
La denunciante asegura que no tiene ninguna prueba que avale lo que dice. Ni siquiera los correos electrónicos que intercambió con Boaventura, dado que le hackearon la cuenta. Da la casualidad de que el sociólogo portugués los guarda... y los ha publicado. En ellos, no sólo se observa un tono cordial en todo momento, sino que se demuestra que la comunicación entre ambos se mantuvo después del acoso que denuncia Millán.
De hecho, la mapuche llegó a pedir dinero unos meses después al profesor: “Hoy en este momento necesito 500 euros a más tardar para este viernes, ya que debo pagar una deuda urgente se me vence el plazo el 8 de julio, te ruego si me pudieras ayudar en eso te lo agradecería. Abrazos y mil disculpas por tirarte encima mis pesares, sos una de las pocas personas en las que confío mucho”. Eso fue en el verano de 2010. En marzo de 2011, le pidió financiación para un libro. En ambos casos, le negó la ayuda.
En resumen: una señora denuncia un abuso sexual ante un periodista, y lo hace sin más pruebas que su testimonio y sin hacer referencia a los correos que envió con posterioridad al acusado, en los que le animaba a colaborar en proyectos profesionales e incluso le rogaba porque le ayudara a pagar sus deudas. A simple vista, podría decirse que alguien que ha padecido un episodio traumático como el que relata haría todo lo posible por no mantener el contacto con el 'agresor'. En este caso, es evidente que no ha sido así.
El peligro de las sospechas
La moda del #MeToo ha contribuido a extender un fenómeno que es mucho menos empírico que peligroso, como es el de la sospecha. Es decir, el de la suposición de que pudo pasar algo que no se puede demostrar, pero que provoca que a ese hombre al que acusan nadie pueda volver a mirarle de forma limpia.
Desde luego, existen bandidos y depredadores sexuales; y habrá quien oculte debajo de la alfombra algunos abusos por los que merecería una larga condena de cárcel. Pero, llegados a este punto, conviene recordar un tópico, y es que todo el mundo es inocente hasta que se demuestre lo contrario. Por otro lado, aunque no lo parezca, esta afirmación es más beneficiosa para las víctimas que para los agresores. ¿Por qué? Porque cuando una sociedad se acostumbra a emitir veredictos a partir de las sospechas, estas se acaban convirtiendo en herramientas para desacreditar a quienes han sido acosadas, pese a que tengan pruebas de ello. “Algo harían”. “Seguro que ellas le provocaron antes”. ¿No les suenan esas frases?
Sería conveniente mantener una postura prudente en estos casos y exigir pruebas contundentes a quienes inician este tipo de campañas de forma coordinada. Sobra decir que los medios somos una parte del problema en todo esto, dado que solemos reproducir esas acusaciones sin matizarlas, dentro de esa política de publicar cualquier frase entrecomillada que llame la atención, sea o no verídica.
De esta forma, hemos creado un ecosistema en el que cualquiera podría ser acusado de un grave delito cualquier día; y podría ser desposeído de todos sus cargos, despedido de su trabajo y abandonado de su familia antes incluso de que tenga tiempo para demostrar que lo que dicen de su persona es falso.
Se ha quedado un día perfecto para cazar brujas y para que quienes viven de lo irracional -desde los chamanes hasta los autoritarios, siempre datos a lo esotérico y lo mágico- obtengan una buena cosecha a partir de la furia de la turba.
Karl
«Mientras no lo tomen en serio, [quien] dice la verdad puede vivir un tiempo en democracia. Después, la cicuta.» ~Nicolás Gómez Dávila
S.Johnson
#Me-NAZI-Too. Es lo que suele pasar cuando se consiente que LA GESTAPO actúe sin control. Mil años luchando para que nadie tenga que demostrar su inocencia y llegan los/las/les NAZIS para que sea imprescindible demostrar que NO se es culpable... Los/las/les dictadores/as/os nazis deben ser puestos fuera de la ley.
eddo
la guatemalteca no deberá temer por haber retirado su denuncia falsa ante lo que supo de juez, dice la ley que "Si ya has denunciado con anterioridad o si se ha retirado la denuncia.". https://tus-ayudas.es/familia/pago-unico-violencia-genero/ ¿Cuándo se pierde la condición de víctima de violencia de género? Nunca. Una vez se te concede la condición de víctima de violencia de género no se te quitará.. Y por eso hay cada vez más denuncias de violencia de género, es lo que quieren las Grisos, todos contentos. Carmen Calvo lo dijo, "a las mujeres hay que creerlas siempre". Por eso este verano volverán miles de mujeres a denunciar pinchazos en España, serán atendidas como en San Sebastián de los Reyes entre el 31 de agosto y 1 de septiembre, hasta que cojan a uno que legitime todo lo legalizado como "delito de odio contra las mujeres por el hecho de serlo".
eddo
https://tus-ayudas.es/familia/pago-unico-violencia-genero/ Todos estos derechos se encuentran en la disposición 20570 del BOE número 297 de 2021. Pero son las comunidades autónomas las encargadas de organizar la respuesta de los servicios sociales frente a situaciones de violencia de género. Por eso, si necesitas alguna ayuda o servicio, deberás solicitarla en la página web oficial del Gobierno autonómico. muy recientemente se han suavizado las condiciones para poder solicitar la acreditación. Hoy en día podrás comenzar con el proceso de acreditación de víctima de violencia de género en los siguientes casos: Si estás planteándote denunciar. En caso de que hayas denunciado, pero que tu procedimiento judicial se haya archivado. Si has denunciado y todavía estás en el procedimiento judicial. Aquellas víctimas que por cualquier motivo ya no tengan protección, en los casos en los que no se haya justificado que no haya riesgo. En el caso en el que no tengas una orden de protección pero que sí haya un proceso judicial abierto. Si ya has denunciado con anterioridad o si se ha retirado la denuncia.
eddo
el gobierno de Rajoy dio 5000 millones para acabar con la violencia de género, Sánchez solo de 2021 a 2024 21. 139 millones, más C A, ayuntamientos. Que van a parar a asociaciones creadas para ello, Fundación Mujeres, la de Pilar Sepúlveda, THEMIS, entre muchas más, ayuntamientos y C A.
eddo
el gobierno de Rajoy dio 5000 millones para acabar con la violencia de género, Sánchez solo de 2021 a 2024 21. 139 millones, más C A, ayuntamientos. QW
eddo
Pero ni Griso, ni Elisa Beni, ni la abogada penalista tertuliana de Griso, ni Serafín, ni Joaquín Bosch juez en activo han sido denunciados por los abogados de oficio de los tres magrebís acusados por un montaje de tres mujeres, que Griso se hizo con ellos para crear alarma social, de delitos contra el derecho al honor, así la impunidad que tanto la molesta a Griso, Elisa y la abogada penalista prevalece siempre. Tampoco fiscalía ha acusado a las tres del montaje para enriquecerse por la legalidad que da ser víctima de delitos sexuales, no es una denuncia falsa, no existe, y la legalidad dará a la guatemalteca el derecho a recibir el título de víctima de género, con todos los derechos económicos, laborales, sociales, y en su caso concreto de "papeles", lo dice la ley, y da votos de las mujeres en las elecciones a partidos políticos en España.
eddo
resulta que fueron detenidos por la llamada de las "testigas" pues les pillaron los policías violándola en la playa. Puestos en prisión preventiva 2 acusados de violación el tercero salió por no participar y acusado de robo. https://www.lavozdeasturias.es/noticia/actualidad/2022/06/01/presunta-victima-violacion-grupal-playa-malagueta-retira-denuncia/00031654079883051119625.htm La supuesta víctima ha decidido retirar la denuncia por agresión sexual, que llevó a ser detenidos e investigados a tres jóvenes marroquíes. Su renuncia a seguir adelante con las actuaciones aboca el caso al archivo, según han confirmado las distintas fuentes judiciales consultadas. La mujer, de origen guatemalteco, compareció en presencia de los abogados que asisten a los tres investigados por estos hechos, que tuvieron una enorme repercusión social y mediática....la jueza ordenó reproducir en su presencia los audios de WhatsApp que habría intercambiado con un amigo y que, a la postre, han supuesto un auténtico vuelco en el caso, tal y como reveló SUR en su edición del pasado 25 de mayo...la mujer reconoce «de manera clara y rotunda», en palabras de la magistrada en el auto mediante el que liberó a los dos investigados que estaban en prisión, que no había sido agredida sexualmente. En esos audios también manifiesta que siguió adelante con la denuncia para obtener la residencia legal en España y acceder a ayudas económicas... la mujer respondió que no y optó por retirar la denuncia....En esas conversaciones, la denunciante llegaba a reconocer que la denuncia «obedecía a la necesidad de solucionar sus problemas de residencia en España», según el auto de la jueza.
eddo
https://www.antena3.com/programas/espejo-publico/noticias/impactante-declaracion-testigo-violacion-grupal-malaga-manejaban-como-muneco-forma-obscena_20220512627cf06c3fa5760001d26015.html Laura Simón periodista de ESP 12 mayo, 2022 13:33 Griso se hace con la noticia y junto con su equipo elaboran desde la playa la malagueta el relato, una "manada" violo a una mujer "borracha", por suerte para ella la salvo una anónima "salvadora", Griso dice que la narración de la "testiga" se ajusta a lo que paso y es clave, el periodista de Diario Sur lo ratifica y relata como la trataron los violadores copiando a lo que dijeron las salvadoras. Elisa Beni dice que hay impunidad por los violadores, sensación de impunidad, una abogada penalista que es tertuliana de Griso dice que es importante la conciencia social de la "testiga". Griso concluye ese día, " cada vez hay más violaciones, cada vez hay más "manadas". Serafín inspector de P N, profesor de policías, representante de su sindicato, afirma lo mismo en ESP, Joaquín Bosch juez, tertuliano y elaborador de leyes como la ley de lenguas afirmo ese mayo "cada vez hay más violaciones en manada"
eddo
https://www.antena3.com/programas/espejo-publico/noticias/impactante-declaracion-testigo-violacion-grupal-malaga-manejaban-como-muneco-forma-obscena_20220512627cf06c3fa5760001d26015.html Juan Cano, periodista de Diario Sur, señala que fueron 2 clientas de la discoteca donde empezó todo quienes siguieron la escena y la narraron a la Policía para que los agentes pudieran intervenir. Se dieron cuenta de que la víctima se encontraba en gran estado de embriaguez y les llamó la atención la actitud de los hombres que estaban al acecho a su alrededor. Les siguieron hasta el Paseo Marítimo, se metieron en la arena de la playa y se escondieron para poder ver qué ocurría.