Los estados federados alemanes de Berlín y Baviera han eliminado a partir de este lunes la obligación de llevar mascarilla en las escuelas.
En Berlín dejará de ser obligatoria la mascarilla en clase hasta el sexto curso, mientras que en Baviera ya no hay que llevarla en clase en ningún caso.
La supresión de la obligatoriedad ha sido objeto de un intenso debate desde hace días. Algunos representantes de asociaciones médicas han considerado como inadecuado el mantenimiento general de la medida en los colegios, mientras que algunos expertos en virología han considerado prematuras las nuevas medidas que flexibilizan el uso de la mascarilla.
Los críticos con esta medida han defendido que las normas de distanciamiento social no se pueden aplicar en las aulas, que muchas personas no están vacunadas por su edad y que el número de contagios es elevado, especialmente entre los jóvenes. Según datos del Instituto Robert Koch (RKI), el coronavirus es especialmente frecuente entre los niños de edad preescolar y los adolescentes.
En vigor desde el viernes
La ministra alemana de Educación, Anja Karliczek, se ha mostrado comprensiva con el fin del uso obligatorio de mascarillas en las escuelas, una medida en vigor en Sarre desde el viernes y está en proceso de estudio en Baden-Wurtemberg y Sajonia.
"Llevar mascarilla interfiere con las clases normales y es estresante para los alumnos", ha explicado la ministra en el periódico 'Rheinische Post' este lunes. "Sin embargo, si se relaja la obligatoriedad de la mascarilla, las pruebas deben continuar o incluso aumentar en las escuelas", ha matizado, especialmente con vistas al periodo posterior a las vacaciones del otoño europeo.
"Porque entonces, según la experiencia del pasado, es muy posible que las cifras de infección vuelvan a incrementarse. La prevención en las escuelas sigue siendo importante, también para la protección de los niños y los jóvenes", ha añadido.
Desde hace unos días, el número de nuevas infecciones de coronavirus ha vuelto a aumentar. Según el RKI, la incidencia de siete días ha aumentado en las últimas 24 horas a 64,7 nuevas infecciones por cada 100.000 habitantes, cuando hace una semana era de 61,7.
