La negociación del techo del gasto público viene marcada por la tributación empresarial. Nuevamente se incide en elevar la presión fiscal a las empresas españolas sin tener en cuenta su

Montoro no consiguió cobrar en 2014 ni un solo euro del Banco Santander por el Impuesto de Sociedades. Es más, tuvo que devolverle 314 millones. Entre 2013 y 2014, el Santander ha pagado de media un 7% de su beneficio en España, muy por debajo del tipo oficial del 30%. En gran medida porque como consecuencia de la crisis todavía tiene 11.638 millones de pérdidas deducibles, según declara la propia entidad en sus cuentas.

La medida supondría un aumento de recaudación de entre 5.000 y 6.000 millones de euros para el Estado. El presidente de la comisión de sabios, Manuel Lagares, ha revelado que FMI, OCDE y UE han mantenido reuniones con los sabios para supervisar la reforma. Según sus palabras, la reforma busca conseguir "la unidad de mercado" y la "neutralidad fiscal", es decir, que las bajadas que se plantean deben venir compensadas por otras subidas.

La comisión de expertos de hacienda a los que el Gobierno encargó el diseño de la reforma tributaria ha entregado su informe al ministro Cristóbal Montoro. En el documento de 444 folios agrupados en 270 propuestas con 125 reformas fiscales, los expertos defienden la "neutralidad fiscal", es decir, el Estado segiurá recaudando lo mismo. "No hemos dejado títere con cabeza", afirma el presidente de la comisión Manuel Lagares.

El grupo para la reforma fiscal que ha designado el Gobierno deberá presentar sus resultados en febrero de 2014. En 2015, el nuevo sistema estará ya en marcha. Según algunos de los expertos que integran ese grupo y miembros del Ejecutivo, el próximo sistema fiscal en España tendrá menos tramos en el IRPF (hasta tres frente a los siete actuales) y menos deducciones fiscales para las empresas. Éstas son sus líneas maestras.

El ministerio de Hacienda publicó anoche por sorpresa el dato de recaudación de diciembre de la Agencia Tributaria. Las cifras muestran que en los últimos dos meses, Hacienda ha retenido 3.791 millones en devoluciones que habrían engordado el déficit si se hubieran producido con el ritmo de otros años. Las devoluciones a empresas caen un 91% y las de la renta un 54%. Sin eso, el déficit habría rondado el 7,1%.