Cómo se llamaba el pueblo. Cómo se llamaba aquel pueblo, no logro recordarlo ahora y en internet no está, o no soy capaz de encontrarlo. Alguien con muy mala leche

Los representantes de los Consejos de Informativos de RTVE han entregado en el Congreso 2.225 firmas para exigir a los partidos un “consenso” que sirva para reformar la radio y la televisión públicas. Han denunciado la “limpia” que han realizado en Torrespaña los actuales directivos de los informativos: “El 95% de los responsables editoriales han sido depurados”.

La presentadora de La mañana de la 1 ha recibido el premio Pata Negra y el premio a la mejor sonrisa en el tablao flamenco madrileño del Corral de la Morería. En el acto, Mariló Montero aprovechó para denunciar que tanto ella como Televisión Española están siendo víctimas de una “manipulación política”, donde “quieren acabar con una cadena de televisión pública”.

Lucir un lazo contra el despido de 21 trabajadores en TVE el pasado 11 de diciembre le ha costado a Loles León su puesto en el programa ‘Amigas y conocidas’, del que era colaboradora. La actriz ha visitado este sábado el plató de ‘Un tiempo nuevo’ en Telecinco para hablar sobre los motivos de su despido.

Los pequeños de la casa han tomado la televisión de una manera gradual y pacífica. Y es que en pocas semanas los espectadores han asistido a cómo un grupo de críos con más o menos arte campaban a sus anchas en el prime time. Todo ello desde que Telecinco puso en marcha el irregular Pequeños gigantes y Antena 3 hizo lo propio con Tu cara me suena mini, donde rostros ya consagrados del programa como Santiago Segura, Roko o María del Monte comparten escenario con un grupo de jovencitos con mucho talento emergente. Dos nuevas fábricas de niños prodigios, en resumidas cuentas.

Hace pocos días, un conocido periódico, que no es el que ustedes están leyendo, preguntaba a sus lectores si, ante los datos de audiencia debería cerrar Televisión Española. Y créannos, no se precipiten en la respuesta. Puede que el ente público tenga muchos problemas -y algunos muy longevos-. Pero ¿es todo tan negativo? ¿No hay ninguna solución razonable? ¿De verdad estamos dispuestos a rendirnos al capital?