Dos de los jueces del Tribunal Supremo que en mayo de 2013 firmaron la sentencia dictada por la que se declaró la nulidad de las cláusulas suelo, vistos los recursos interpuestos por Ausbanc, participaron con anterioridad en foros organizados por el grupo de Luis Pineda. Uno de ellos admite que cobró por sus intervenciones.
Los jueces Antonio Salas Carceller y Xavier O'Callaghan Muñoz debatieron sobre la mediación como alternativa judicial en el III Foro de la Justicia de Ausbanc, celebrado en diciembre de 2010 en el Hotel Hilton Barcelona.
El magistrado Salas Carceller admite a Vozpópuli, a través del gabinete de comunicación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que ha participado en dos foros organizados por Ausbanc, además del de Barcelona, en otro celebrado en Palma de Mallorca. El juez dice que cobró una cantidad inferior a los 800 euros brutos, y que en la sentencia de las cláusulas suelo se opuso a las pretensiones de Ausbanc. No ha sido posible recabar la opinión al respecto del magistrado O'Callaghan.
Uno de los jueces que firmó la sentencia del Supremo condenó meses después al presidente de CreditServices por llamar extorsionador a Pineda
La sentencia del Supremo de mayo de 2013 obligó a BBVA, Novagalicia, y Cajamar a retirar las cláusulas suelo de sus carteras hipotecarias. Las tres entidades se habían negado a inyectar fondos al grupo de Luis Pineda a través de publicidad en sus medios. La participación del juez Salas Carceller en el foro de Barcelona se produjo tres meses después de que un juzgado mercantil de Sevilla anulara las cláusulas suelo. La Audiencia Provincial rechazó esa sentencia del mercantil de Sevilla, y Ausbanc Consumo interpuso recurso de casación. El 19 de marzo de 2013 el Pleno del Tribunal Supremo sometió a deliberación, votación, y fallo el recurso de Ausbanc, y el 9 de mayo comunicó la sentencia.
El CGPJ explicó el jueves a través de un comunicado que la participación en cursos o conferencias, retribuidas o no, es una actividad totalmente compatible, según establece el artículo 389.5 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que señala que el cargo de juez o magistrado es incompatible “con todo empleo, cargo o profesión retribuida, salvo la docencia o investigación jurídica, así como la producción y creación literaria, artística, científica y técnica y las publicaciones derivadas de aquella, de conformidad con lo dispuesto en la legislación sobre incompatibilidades del personal al servicio de las Administraciones Públicas”.
El organismo destacó que la presencia de miembros de la Carrera Judicial “en foros, cursos o jornadas públicos junto a otros actores del sector de la Justicia contribuye a enriquecer el debate, fuera de las salas de vistas, sobre cuestiones que afectan a toda la sociedad”. Y añadió que la “integridad y profesionalidad de los jueces españoles es incuestionable, así como su compromiso con la Administración de Justicia y el Estado de Derecho”.
El caso de Javier López
Francisco Javier Orduña Moreno es otro de los magistrados que firmaron la sentencia de mayo de 2013 de las cláusulas suelo. El juez valenciano firmó también la sentencia de la Sala Primera del Tribunal Supremo que meses después condenó al presidente de CreditServices, Javier López, a indemnizar a Luis Pineda por haberle llamado extorsionador.
El 3 de enero de 2014 el Supremo condenó a CreditServices y a Javier López a pagar 44.000 euros por intromisión ilegítima en el honor de Luis Pineda, así como a publicar en varios medios el fallo. La sentencia estableció una multa de 600 euros por cada día de retraso en la ejecución de la sentencia; López, como comentó en una entrevista con Vozpópuli, no ha podido pagar todas las cantidades reclamadas, y estima que la cantidad que se le exige ahora puede ascender ya a más de medio millón de euros. La empresa de López pudo sufragar sólo la publicación de la sentencia en varios periódicos.
Según comentó Javier López en un encuentro con este diario, el hostigamiento de Luis Pineda fue tal que tras insertar la sentencia condenatoria en el diario El País, el presidente de Ausbanc reclamó, con éxito, que la sentencia fuera de nuevo publicada porque había sido insertada con un cuerpo de tipo de letra ligeramente inferior al descrito en la sentencia, un coste aproximado por publicación de 21.000 euros.
En 2015 una de las revistas de Ausbanc publicó un lisonjero perfil del juez Orduña Moreno titulado El magistrado y su circunstancia. "Hay personas como el señor Orduña con una rica mímica facial, que anima todo el rostro. Por una parte, presenta asimetría enriquecedora en el lado derecho del rostro, más alto que el izquierdo. Por otra, el músculo frontal externo está fuertemente marcado lo que denota gran receptividad afectiva", dice el artículo de Ausbanc. "La boca de labios carnosos y poco firmes, al igual que la nariz, acusa fuerte sensorialidad. Así y todo, predomina el mundo de las ideas con un intelecto tan sutil como perspicaz".
Orduña Moreno fue nombrado magistrado de la Sala Civil del Tribunal Supremo en diciembre de 2011, siendo catedrático de Derecho Civil de la Universitat de Valencia, director del Departamento de Derecho Civil de la Universitat, vocal de la Junta Electoral de la Comunidad Valenciana, y miembro del Consejo de Universidades.