La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha afirmado que "España no aguanta más" al Gobierno que preside Pedro Sánchez y que está siendo "una verdadera maldición para todos", y ha asegurado: "La España real no quiere esto más".
Ayuso se ha pronunciado así ante alrededor de un millar de personas que han asistido este domingo a un mitin en el jardín del Turia de Valencia, junto a los candidatos del PP a la presidencia de la Generalitat, Carlos Mazón, y a la alcaldía de València, María José Catalá, como inicio de la precampaña para las elecciones del 28 de mayo.
"Del socialismo se sale", ha asegurado la presidenta madrileña, quien ha considerado que ha acabado lo de "dividir a España" y ha considerado que el 28 de mayo comienza "una nueva etapa" para el país, por lo que ha pedido que ese día se pongan "8.000 mociones de censura el proyecto sanchista" por toda España.
Un proyecto, ha añadido, "totalitario" al que hay que decirle que "España no les aguanta", por lo que a su juicio hay que "despertar" a los ciudadanos para lograr "otro rumbo en España" y que el 28 de mayo sea "el comienzo del cambio final" del sanchismo, de la división, del odio y del rencor.
Ayuso ha pedido ir a las elecciones del 28 de mayo a votar "en positivo" y no "a la contra" y ha instado a "volver a levantar el "eje de próspero" entre la Comunidad de Madrid y la Comunitat Valenciana y trabajar unidas, en lugar de que ambos territorios se reten, como según ha afirmado hace "constantemente" el president de la Generalitat, Ximo Puig.
Ayuso ha resaltado que la Comunitat Valenciana hace años era vista con "orgullo y admiración" desde fuera, pero hace mucho que la imagen de esta tierra ha cambiado "para mal", si bien ha considerado que dentro de muy poco "volverá a sorprender" a la sociedad y al mundo con "lo lejos" que es capaz de llegar esta tierra.
Ha mostrado asimismo su solidaridad con los afectados por el "terrible" incendio de Castellón, a los que ha dicho que van a estar a su entera disposición para todo lo que necesiten, y finalmente ha reivindicado que Valencia vuelva a ser una ciudad "pujante".