Las monumentales instalaciones de malla de alambre que simulan grandes elementos y conjuntos arquitectónicos construidos por el artista italiano Edoardo Tresoldi en una antigua iglesia italiana, en un real evento en el emirato de Abu Dabi y en unos grandes almacenes de París tienen un aspecto tan enigmático como cautivador, e incluso fantasmal.
Tresoldi (1987, Milán, Italia) señala que en sus trabajos juega con la transparencia de la malla y con los materiales industriales “para trascender la dimensión del tiempo-espacio y narrar un diálogo entre el arte y el mundo, creando un resumen visual que se revela en el desvanecimiento de las limitaciones físicas”.
Desde 2013, realiza intervenciones artísticas en espacios públicos, contextos arqueológicos, festivales de arte y música contemporáneos, centrando su investigación en el espíritu de cada lugar y los elementos del paisaje.
Las obras del italiano producen un impacto visual único, pues parece que van a materializarse, desvanecerse o fusionarse con el entorno
Las esculturas y edificaciones construidas con mallas de alambre y otros materiales industriales que resaltan con luces espectrales juegan con la transparencia hasta el límite, produciendo un impacto visual único, pues parece que van a materializarse, desvanecerse o fusionarse con el entorno.
Las obras de Tresoldi pueden tener múltiples definiciones, como “fantasmales”, “translúcidas” o “hechas de aire”, pero la mayoría de quienes las contemplan admiten su gran impacto visual y emocional.
La resurrección de una iglesia
La revista de diseño y arquitectura ‘designboom’ incluyó en la lista de las 10 mejores instalaciones de 2016 la restauración de la Basílica paleocristiana de Siponto, una convergencia única entre el arte contemporáneo y la arqueología, efectuada por Tresoldi junto con el ministerio italiano de Cultura.
En la región de Apulia (Puglia, en italiano) localizada en el sur de Italia, el parque histórico de Siponto es conocido como un sitio de gran importancia arqueológica. Esta zona, que anteriormente fue uno de los principales puertos en la región, fue abandonada después de una serie de terremotos en el siglo XIII.
Actualmente, junto a varios artefactos emblemáticos de arquitectura apuliana-románica, Siponto alberga los antiguos restos de una antigua basílica cristiana, que muestran el papel de la ciudad como una de las diócesis más importantes de la región en la antigüedad, según ‘designboom’.
En el sitio arqueológico de esta iglesia primitiva, edificada alrededor del año 1.000, denominada Santa Maria Maggiore di Siponto y cuya arquitectura tiene influencia islámica, Tresoldi construyó una espectacular instalación de malla de alambre que simula la antigua basílica en 3D, exactamente sobre sus restos, y refleja la calidad arquitectónica de la antigua ciudad.
En el sitio arqueológico de una iglesia primitiva, Tresoldi construyó una espectacular instalación de malla de alambre que simula la antigua basílica en 3D, exactamente sobre sus restos
La escultura, titulada 'Basílica di Siponto' y hecha con capas de malla de metal cruzadas y solapadas para formar arcadas cavernosas, columnas altísimas y un techo románico, ocupó el vasto espacio como un volumen claro y transparente, resucitando los restos arqueológicos como una forma escultórica para que los visitantes experimentasen y exploraran in situ.
Una vez terminado el diseño de esta estructura fantasmal compuesta de siete toneladas de cableado de acero, Tresoldi y su equipo cortaron distintas secciones de malla de alambre, como si fueran las piezas de un rompecabezas, cada una de las cuales representaba un módulo de la iglesia y las ensamblaron usando unas grapadoras especiales, según la revista tecnológica ‘Wired’.
"Me gustaba la idea de dibujar en el espacio, y este trabajo era una nueva forma de pensar sobre la transparencia. No es como usar el vidrio: en este edificio todavía se puede sentir el viento, escuchar los sonidos del exterior, no hay un "afuera real”, señaló el artista italiano respecto de Siponto.
Naturaleza geométrica
Uno de los trabajos más espectaculares de Tresoldi es ‘Archetype’ (arquetipo), una obra diseñada y construida dentro de un evento real en Abu Dhabi, en colaboración con el estudio Dubai Designlab Experience, parte de la cual será reinstalada por separado en universidades, museos y parques de la capital de los Emiratos Árabes Unidos (EAU).
“‘Archetype’ es un jardín donde la arquitectura y la naturaleza bailan juntas en continuas conexiones y contrastes, y una obra artística en la que una serie de elementos de geometría absoluta, como esferas, cubos y planos, cortan y rompen las armonías clásicas, a través de transparencias y sus “ritmos rotos”, informa a Efe Antonio Oriente, gerente del estudio Tresoldi.
El efecto global de ‘Archetype’ es el de una evolución continua de abstracciones arquitectónicas, distorsiones evanescentes y descomposiciones visuales y volumétricas, según explica el propio Edoardo Tresoldi en su página web.
“Es un paisaje en el que la naturaleza crece y evoluciona en un espacio imaginario, intentando dar forma y materia a las visiones humanas, y donde el lenguaje clásico y modernista se fusionan generando un tercer lenguaje, fuertemente contemporáneo, añade Antonio Oriente.
Arquitectura "en ruinas"
La instalación más reciente del artista milanés se llama 'Aura', y tuvo lugar dentro de los grandes almacenes Le Bon Marché Rive Gauche, en París (Francia). “Inspirado por el neoclasicismo y los palacios renacentistas italianos, Tresoldi ha desarrollado una reflexión sobre el paso del tiempo y la transformación de la materia, desde las formas clásicas hasta los contenidos contemporáneos, a través del concepto de arquitectura en ruinas y de la imperfección”, explica el gerente.
Para construir dos cúpulas -una de malla de alambre y otra de chapa ondulada- en los techos de cristal de los almacenes parisinos de Le Bon Marché Rive Gauche, Tresoldi empleó cinco noches
Esta idea se materializó mediante la construcción de dos cúpulas, una en malla de alambre y otra de chapa ondulada -un material que Tresoldi utilizó aquí por primera vez- de 8 metros de largo, suspendidas de los majestuosos techos de cristal diseñados por Gustave Eiffel, lo que requirió cinco noches de trabajo.
“Las dos instalaciones tienen una forma casi idéntica, pero con características físicas diferentes: la de malla de alambre se refiere al alma de la forma, la dimensión etérea de otro mundo; mientras que la de chapa ondulada es una concha vacía relacionada con la dimensión terrestre”, señala el autor de la obra.
“Ambas obras de arte son como un fantasma arquitectónico evocado por la descomposición de las formas y el uso de materiales industriales, son como reliquias expuestas en un museo de historia natural del siglo XVIII y, al observarlas, los visitantes siguen la pista a la cualidad histórica de la arquitectura a través de sus componentes”, en palabras del artista italiano.