El hombre buscado por la Policía Nacional por el asesinato a golpes y cuchilladas de una mujer española nacida en 1972 en la localidad madrileña de Parla acumula un historial de casi treinta detenciones por diferentes hechos, según han indicado a la agencia Efe fuentes de la investigación.
La última de estas detenciones tuvo lugar en febrero, mes en el que el hombre fue arrestado por quebrantar la orden de alejamiento después de que un vecino alertara a la policía de una discusión en la casa de la mujer, lo que condujo a la detención del presunto autor, ya que tanto este como la víctima se encontraban dentro del domicilio.
Entonces, ella trató de ocultar la presencia del hombre en la casa, pero los agentes detectaron su presencia y lo arrestaron.
La víctima, asesinada a cuchilladas y golpes, había reanudado la convivencia con su pareja pese a que previamente había conseguido una orden de alejamiento que pesaba sobre su supuesto agresor, de origen marroquí, al que busca la Policía.
Los agentes hallaron anoche en la vivienda en la que residía su cadáver signos de violencia, indicios que llevaron a los investigadores a tratar el caso como un crimen machista.
Según han indicado a Efe fuentes de la Jefatura Superior de Policía, los agentes de la Comisaría de Parla recibieron el aviso de la desaparición de la mujer después de algunos días en los que sus allegados no sabían nada de ella.
Desde el miércoles
Los investigadores creen que podría estar muerta desde el pasado miércoles, pero este extremo tendrán que confirmarlo la autopsia.
También los vecinos habían advertido en los últimos días que no había movimiento en el domicilio de la víctima, y que esta había abandonado la actividad en las redes sociales, de la que era usuaria frecuente.
Tras comprobar que la víctima había denunciado episodios de violencia machista, los investigadores trataron el caso como una desaparición inquietante e inmediatamente comenzaron las pesquisas.
Después de no localizarla en los lugares que habitualmente frecuentaba, a las once de la noche de este sábado los agentes decidieron entrar en el domicilio, ubicado en el número 20 de la calle Reyes Católicos de la localidad.
La Policía halló su cadáver con signos de violencia y, de acuerdo a los primeros indicios, decidió investigar el suceso como un posible caso de violencia machista, aunque los investigadores por el momento no descartan ninguna hipótesis.