La Inspección de Trabajo visitará este viernes las salas de asilo de Barajas para comprobar el estado en el que trabajan los agentes de la Policía Nacional y las circunstancias en las que los solicitantes esperan su resolución en el aeropuerto. El Sindicato Unificado de Policías (SUP) denunció hace una semana que los funcionarios desarrollaban su labor en lugares donde había una plaga de chinches y un "hacinamiento extremo", según el texto al que tuvo acceso Vozpópuli.
Esta visita ha sido anunciada en un vídeo por Jacobo Rodríguez, el portavoz del sindicato policial que denunció la situación. El representante del SUP ha invitado al resto de entidades policiales que acompañe el recorrido de la Inspección de Trabajo.
La denuncia al Ministerio de Trabajo y Economía Social de Yolanda Díaz fue interpuesta el pasado jueves por la noche por los representantes del SUP. En el texto argumentan que desde hace cinco meses se están multiplicando las quejas de los policías que prestan servicio en las salas de inadmitidos y asiliados de Barajas. La primera de ellas se originó en la Sala 4.
No obstante, según el SUP, la plaga se ha extendido de forma paulatina a las Salas 2 y 3. "Hasta la fecha se han tomado ciertas medidas, pero no ha mejorado ni la plaga de chinches, ni las condiciones de hacinamiento de los solicitantes de asilo que pasan por estas dependencias, lo que supone un grave riesgo de exposición tanto a las picaduras de estos insectos como a la transmisión de múltiples enfermedades", advirtieron desde este sindicato policial.
La fumigación de las salas
Sin embargo, la situación en Barajas ha mejorado en los últimos días. Los empleados de limpieza de la Policía Nacional han estado fumigando las diferentes salas para acabar con esta plaga de insectos. Además se ha reducido en un centenar casi la cifra de inmigrantes que permanecen en las diferentes estancias y el Ministerio del Interior ha abierto otra más.
Por otra parte, la Jefatura Superior de Policía Nacional de Madrid ha vuelto a reforzar el número de efectivos en las salas de solicitantes de asilo de Barajas. Decenas de agentes serán destinados en las próximas horas al aeropuerto y se encargarán de las seguridad para evitar posibles fugas o incidentes, según una orden a la que ha tenido acceso Vozpópuli. La situación en las instalaciones ha mejorado en las últimas horas gracias a la celeridad en los trámites para evaluar las peticiones que se están produciendo.
Estos agentes se unirán a los 54 que ya están distribuidos en turnos dedicados todos los días de la semana a la realización de entrevistas en el puesto fronterizo. El Ministerio del Interior anunció la apertura del pasado martes de una nueva sala para acoger a estos solicitantes de asilo.
El refuerzo de Barajas
La nueva orden, que se ha emitido este jueves, es un anexo en el que se amplían los datos y la fuerza el 'Apoyo a la Comisaría del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas en la Sala de inadmitidos'. El refuerzo comenzó el 15 de enero y se argumenta debido al "aumento de peticionarios de protección internacional" que ha obligado a abrir este martes este nuevo espacio que ya ha acogido a 50 personas.
En total se ha reforzado el servicio con una decena de agentes más. Habrá varios indicativos de los Grupos de Atención al Ciudadano (GAC), que se dedicarán servicios de protección en la nueva sala, todos los días y hasta nueva orden. Su objetivo será evitar "posibles fugas e incidentes que pudieran ocurrir". Serán relevados en otros tramos horarios por agentes de la UPR.
Hay 257 solicitantes de asilo
Este refuerzo forma parte del Plan establecido por la Jefatura Superior de Policía Nacional de Madrid. Precisamente, el jefe Manuel Soto, se ha desplazado en varias ocasiones, algunas de ellas en horario nocturno, a Barajas para conocer de primera mano la situación en la que trabajan los funcionarios que se encuentran solos en el aeropuerto tras la marcha de Cruz Roja.
La fotografía de Barajas ha cambiado de forma "notable" en las últimas horas para la Policía Nacional. Hay un total 257 personas. La Sala 4 es la más numerosa con 133, después está la Sala 3 con 102 y en la Sala 2 conviven 22 mujeres y niños. Se ha fumigado la Sala 1.
El SUP denunció que desde Cruz Roja abandonó la asistencia de los inmigrantes en las instalaciones las recetas de los asiliados se amontonaban días y días. Ahora, han anunciado que la gestión de los medicamentos necesarios y recetados por los servicios médicos será desarrollada en Barajas por los policías, y pagada, por la propia Jefatura de Policía Nacional de Madrid.
marqueslinchado
La PSOE, hambre y chinches