La Masonería, que tan mala fama ha tenido en España desde aquello del contubernio es, desde luego, como poco la gran desconocida pese a la de bibliotecas que se podrían llenar con títulos al respecto. Sobre su historia o sus supuestos mitos. Todo envuelto en una neblina de misterio tan diferente en otros lugares como París y Londres, donde sus sedes o templos están de todo menos escondidos. Muy al contrario. ¿Qué títulos interesantes podríamos leer sobre esta Sociedad Secreta (o discreta, como dicen sus miembros)? Un poco de todo:
Palabras de Unión, Masonería y Modernidad, editado por Atanor, de Ignacio Merino, es un libro que pretende dar a conocer, con toda la normalidad que ello fuera posible sobre este tema, qué es esto de las logias y demás parafernalia, la verdad, algo decadente y pasada de moda. Teniendo en cuenta que Merino es Maestro del Rito Francés en la Gran Logia Simbólica Española, digamos que una cierta autoridad sobre el tema tiene. Ahora bien, siempre queda la duda no sobre lo que cuenta, sino sobre lo que pudiera callar.
Masonería, religión y política, editado por Sekotia, es una visión que viene de uno de los enemigos, parece ser que mutuo. Es obra del sacerdote Manuel Guerra Gómez, donde quiera sacar a la luz la parte más oscura de la Masonería y sus seguidores. Nos revelará, según su visión, el profundo anticristianismo así como su culto luciferino (¡ojo!, no confundir a Lucifer con Satanás. Error muy común), y su infiltración en instituciones y partidos españoles. La conspiración parece estar servida. Con el Club Bilderberg ya a nivel internacional, que para los amantes de este tema, nada mejor que El Club Bilderberg: Los Amos del Mundo de Cristina Martín Jiménez. Cuarto milenio en estado puro.
La Masonería: un Estado dentro del Estado, editado por Planeta, del prolífico César Vidal, termina un trabajo empezado hace unos años en su otro libro de tipo más general sobre el tema, Los Masones, donde actualiza su historia con el descubrimiento de las conexiones religiosas y políticas, y con el atractivo innegable que esta sociedad ha supuesto para dirigentes de toda condición. Que lo de Mario Conde parece que lo sabe todo el mundo, ¿pero lo de José Luis Rodríguez Zapatero? Tal vez esto explique muchas cosas…
Para dejar un par de títulos a un lado y a otro, y allá cada cual con sus preferencias, están los siguientes, que considero interesantes. En El arte de trabajar en logia, editado por la Fundación María Deraismes, de Francis Frankeski, se podrá uno emocionar, si está por la labor, con el trabajo y el día a día de las logias, escrito por un conocedor de parte. En Yo fui masón, editado por Libros Libres, Maurice Caillet nos cuenta esa cara oculta que antes mencioné, él como alto miembro que fue del Gran Oriente de Francia, y pese a las supuestas amenazas que recibiera para no contar lo que aquí cuenta.
Difícil elección entre tantos títulos, aunque hay para todos los gustos según si nos vemos inclinados a pensar que el gran Ojo nos mira, de si estamos o no pensando en hacernos aprendiz y ajustarnos un mandil a nuestra cintura, o tan sólo conocer qué de verdad hay en los símbolos masónicos que podemos encontrar en muchos más sitios de lo que imaginamos. Algunos muy a la vista como sucede en la capital de, las de nuevo, Españas. ¿Saben cuáles?