Admiradas por sus propiedades, las infusiones se han convertido en el complemento perfecto de la dieta diaria de miles de personas que han descubierto los beneficios que algunas plantas naturales tienen para nuestra salud. Adelgazar es una de las cualidades más buscadas y que han convertido la cola de caballo en una de las infusiones más consumidas.
Utilizada desde la antigüedad con fines medicinales, la cola de caballo es una planta se caracteriza por sus tallos redondos, verdes y acanalados que carece de flores y cuenta con una textura áspera que hace que recuerda a la crin de un caballo, de ahí el nombre por el que se conoce al ‘equisetum’ (proviene de ‘equus’ (caballo) y “setum” (crin o pelo)).
Desde el punto de vista nutricional, esta planta destaca por su contenido en flavonoides, taninos gálicos, esteroles, ácido cafeico, y sales minerales, entre ellas salicílica, una de las más admiradas. El silicio es importante para la formación del tejido conectivo, las uñas y los huesos.
La cola de caballo, un aliado para adelgazar
Entre las propiedades de la cola de caballo destaca la antiinflamatoria, que la convierte en un buen remedio contra los gases y la inflamación abdominal, aunque son las diuréticas y depurativas las que hacen que esta planta sea una de las más reconocidas y usadas.
Gracias a su efecto diurético, la cola de caballo ayuda a eliminar las toxinas de nuestro cuerpo a través de la orina. Su consumo puede aumentar hasta en un 30 por ciento la secreción de orina, por lo que favorece la eliminación de toxinas y combate la retención de líquidos.
Por ello, la cola de caballo se ha convertido en uno de los remedios naturales perfectos para aquellos que quieres eliminar algunos kilitos no deseados. Así lo confirma la Agencia Europea del Medicamento que aprueba su uso con el fin diurético.
Hay que tener claro que plantas diuréticas como la cola de caballo no adelgazan por sí solas, ni pueden sustituir a la alimentación sana y equilibrada, pero son un complemento puntual para perder peso.
Diversos estudios avalan el poder depurativo de esta planta reconociendo que el aumento de la micción ayuda a limpiar el tracto urinario, por lo que también es beneficioso para algunos trastornos leves como cistitis, nefritis, prostatitis y para la expulsión de cálculos renales.
Purifica y mejora la salud de la piel y el pelo
El efecto depurativo que ofrece al cuerpo la cola de caballo también proporciona una mejora en el aspecto y la salud de la piel, ‘limpiando’ desde dentro.
Además, su alto contenido en silicio favorece la creación de colágeno, uno de los imprescindibles aliados para la piel y su elasticidad, y para mantener un cuero cabelludo saludable. Por ello existen numerosos complementos alimenticios para la mejora del crecimiento del pelo y cremas antienvejecimiento que cuentan entre sus ingredientes con cola de caballo.
Aunque su consumo más extendido es en forma de infusión, también podemos encontrarla en cápsulas en herbolarios, tiendas especializadas y grandes superficies.
Contraindicaciones de la cola de caballo
Al igual que con otros diuréticos, hay que controlar el consumo de cola de caballo. Una pérdida excesiva de agua y sales minerales puede causar deshidratación y afectar negativamente sobre la tensión e incluso el corazón.
Esta deshidratación puede provocar molestias digestivas, pérdida de apetito y dolor de cabeza. Pero además, un exceso de cola de caballo en nuestro organismo resultaría tóxico y provocaría desde alteraciones en el ritmo cardiaco a fiebre o debilidad muscular.
Los expertos recomiendan controlar las cantidades que se consumen diariamente de cola de caballo y no prolongarlo durante mucho tiempo. Aconsejan un máximo de seis semanas de manera continuada.
También advierten que en caso de estar tomando algún tipo de medicación, es necesario consultar con un especialista, ya que pueden interaccionar.
El consumo de cola de caballo está desaconsejado en embarazadas, mujeres en periodo de lactancia, casos de hipotensión, de niveles bajos de potasio o insuficiencia renal, entre otros.
