Utilizar de forma abusiva calzado sin sujeción al tobillo, como las chanclas, puede provocar lesiones en los tobillos, rodillas y caderas, modificar la pisada y provocar infecciones, según han destacado desde el Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad de Madrid (COPOMA) con el objetivo de informar sobre la "importancia" de elegir el calzado adecuado y alertar sobre las dolencias de este tipo de zapatos.
Durante la época estival se recurre a zapatos con los que se puede tener los pies al descubierto y se tienda a caminar descalzos como consecuencia de las altas temperaturas y la estancia en la playa y piscinas. En este sentido, los expertos han puesto de relieve la "importancia" de elegir el calzado adecuado para el verano, con el objetivo de no ver afectada la salud de los pies.
Riesgos de salud
Así, ha destacado la utilización de chanclas sin sujeción, que puede acarrear problemas de salud como lesiones en los tobillos, rodillas y caderas. En este calzado, la suela no tiene grosor, dureza o resistencia suficiente. Además, suele ser demasiado plana, lo que puede provocar alteraciones en la marcha, ya que el pie no amortigua el contacto con el suelo correctamente.
Asimismo, puede modificar la pisada, ya que al no tener sujeción los pies buscan el equilibrio a través de los dedos de los pies, lo que hace aplicar una mayor fuerza que puede provocar dedos en garra. Por otra parte, las chanclas suelen estar hechas de plástico, lo que se puede convertir en un nido de bacterias que pueden dar lugar a infecciones.
Consejos de uso
De este modo, desde COPOMA recomiendan utilizar chanclas únicamente en zonas húmedas como vestuarios, playas o piscinas. Respecto a las sandalias, aconsejan que no sean de plástico, que tengan una suela lo más gruesa posible, que facilite que los pies transpiren para evitar la sudoracion excesiva, y que sujete correctamente el tobillo.
Por último, destacan la "importancia" de extremar la higiene y mantener nutridos e hidratados los pies. Para ello, sugieren lavarlos todos los días con jabones neutros y secarlos adecuadamente. Asimismo, apuntan que contar con la opinión de un profesional puede ayudar a prevenir posibles afecciones.