El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Miguel Cardenal, ha pronosticado que el Proyecto de Ley Orgánica de protección de la salud del deportista y lucha contra el dopaje en la actividad deportiva, la conocida como Ley Antidopaje, podría estar aprobado en la primera quincena de octubre. Así lo indicó el presidente del CSD en su comparecencia en la Comisión de Educación y Deporte en el Congreso de los Diputados, la tercera en tan sólo seis meses, en la que confirmó que el anteproyecto podría ser aprobado en la reunión de este viernes por el Consejo de Ministros, tal y como adelantó este martes el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, en los Desayunos de Europa Press.
Cardenal precisó que está previsto que este viernes el Consejo de Ministros apruebe el informe del anteproyecto de ley y, a partir de ese momento, se abra el trámite de audiencia, por lo que la idea del Gobierno es poder aprobar el Proyecto de Ley "en la primera quincena de octubre y así poder remitirlo a sede parlamentaria para su discusión y tramitación en esta cámara". "Es una ley por definición complicada que debe hacer frente a una batería de supuestos muy amplio y queremos tener, en un breve tiempo, ese trabajo elaborado", manifestó el secretario de Estado para el Deporte, que subrayó el "papel primordial" que desempeñará la Agencia Estatal Antidopaje una vez entre en vigor esta norma. "Con la misma se pretende corresponder a esta Agencia con la mayor independencia posible, para lo que se activarán una serie de medidas para cumplir con dicho objetivo, como, es la atribución a la Agencia de la competencia exclusiva sobre la instrucción del procedimiento sancionador en materia de dopaje", señaló.
El presidente del Consejo indicó que una de las diferencias más notables respecto a la anterior Ley "es la amplitud de significado que se le ha pretendido otorgar al concepto de la protección de la salud del deportista". "Hemos considerado que la misma debe sostenerse sobre una acepción de patología que afecta a cuestiones como la prevención de los riesgos asociados, al juego limpio y a la dimensión ética del deporte", añadió. Por ello, el anteproyecto de la Ley Antidopaje divide el contenido de la norma en dos aspectos: la protección de la salud de los deportistas, que y la lucha contra el dopaje.
Así se establece un sistema de reconocimientos médicos "más intenso" cuanto más exigente es la actividad física, la obligación de las instalaciones deportivas de que dispongan de medios de lucha contra las enfermedades cardio-respiratorias agudas, se instaure un sistema de tarjeta de salud de los deportistas de alto nivel o de carácter profesional y se contemplen medidas de protección de la salud una vez finalizada la actividad deportiva.
En dopaje, el objetivo es el de lograr mantener un equilibrio entre la adaptación de la legislación española a las "peculiaridades" de las fórmulas de represión del Código Mundial de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) y "el pleno respeto de los derechos fundamentales" de los deportistas y su entorno. La Agencia asumirá, además, el protagonismo máximo no sólo en el aspecto técnico sino en la planificación y la realización de los controles, y las federaciones deportivas pasan a tomar una "posición más neutral" en la instrucción de los procedimientos sancionadores.
"Hemos ido de la mano de las organizaciones internacionales que actúan en este ámbito para despejar cualquier tipo de duda sobre nuestro compromiso en esta materia y cumplir con el Código Mundial Antidopaje", sentenció Cardenal sobre un asunto clave para la candidatura de Madrid a los Juegos Olímpicos de 2020.
