Antoine Griezmann ha acostumbrado mal a los seguidores galos. El delantero del Atlético de Madrid ha sido una figura clave dentro de la selección francesa, consolidándose incluso como uno de los mejores jugadores de la historia de 'Les Bleus'. Sin embargo, su rendimiento está dejando mucho que desear en esta Eurocopa 2024, dando lugar a un intenso debate entre los más acérrimos al deporte rey. Muchos dicen que la magia del 'Principito' comienza a apagarse poco a poco.
A sus 33 años, Griezmann sigue siendo un titular indiscutible en el once de Didier Deschamps, seleccionador francés, pero su nivel está muy lejos de sus mejores actuaciones, tanto en datos y estadísticas como en aportación colectiva. En el debut de Francia en el torneo continental, el delantero jugó los 90 minutos contra Austria, al igual que sucedió en el segundo duelo ante Países Bajos. Sin embargo, en el tercer encuentro frente a Polonia, Deschamps apostó por su descanso para "dosificar energía pensando en los octavos de final". Ahí, Griezmann solo jugó media hora en una posición poco habitual: la banda derecha, algo impropio desde su etapa en la Real Sociedad.
La decisión de colocar a Antoine Griezmann va encarrilada al interés apuntado anteriormente. "Se decidió que Griezmann estaría algo más cómodo si le colocábamos un poco más en la banda derecha. Jugó con mayor libertad y menor fatiga física", explicó tras el cierre de la fase de grupos Guy Stéphan, el segundo de Deschamps. Concepción, por lo tanto, que preocupa hasta en la dos veces campeona mundial.
Además, después de recuperar la titularidad en los octavos de final contra Bélgica, donde volvió a jugar todo el partido, quedó evidente su cansancio. No es para menos. La larga temporada con el Atlético de Madrid, donde jugó 48 encuentros y acumuló un total de 3.917 minutos, parece haberle pasado factura y es justo ahí donde muchos medios internacionales ponen el foco. A pesar de un impresionante inicio de campaña, coronándose, por ejemplo, como MVP del mes de noviembre, su rendimiento fue decayendo con el paso de los meses, aunque terminaría sumando 24 goles y 8 asistencias a su cómputo.
Nada comparable con sus estadísticas en esta Eurocopa: cero goles y cero asistencias en 300 minutos de juego. No obstante, el técnico francés no ha dudado en defender a Griezmann en las ruedas de prensa. "Podría tener algo más de efectividad, pero en los grandes partidos sé que puedo confiar en él". Mismo argumento presentan compañeros de su selección como Adrien Rabiot. "Esperamos mucho más de Antoine porque es capaz de hacerlo. Tenemos un equipo de primera, pero obviamente sería más fácil si él estuviera en plena forma. Estamos con él y sabemos que aparecerá", sentenció el futbolista de la Juventus justo antes del encuentro contra España.
Griezmann: triste idilio del 'Principito'
Fuera de no marcar ni asistir, el delantero galo tampoco ha generado ocasiones de peligro, siendo muy poco activo en el juego táctico de Francia -con menos de 50 toques por partido-, sin éxito en el regate -menos de un 'dribbling' por encuentro- y acumulando incluso más pérdidas de balón de lo esperado -hasta 11 por contienda-. Es titular sí, pero ni su juego ni su rol se asemejan ni un mínimo a ese jugador que se echó a los hombros a toda una campeona del Mundo (2018).
Fue titular en los siete partidos que disputó la selección francesa, acumulando 570 minutos y cuatro goles. Griezmann disparó 19 veces en total, repartiendo además dos asistencias y siendo clave tanto en las jugadas ofensivas -con 12 regates completados- como en la defensiva -consiguiendo recuperar 26 balones en total-. Datos que, sin duda, avalan una de las mejores actuaciones del Mundial 2018, premiada con el balón de bronce, sólo por detrás del croata Luka Modrić y el belga Eden Hazard. Por si fuera poco, el delantero francés fue nombrado hombre del partido hasta en tres ocasiones: ante Australia (fase de grupos), Uruguay (cuartos) y Croacia (final).
La situación ahora de Griezmann ha cambiado; y con ella la imagen tanto de su club como de su selección. Para empezar, la temporada del Atlético de Madrid ha sido un tanto pobre, rezagado a la cuarta posición de LaLiga y compitiendo hasta los últimos suspiros de la competición por su correspondiente sitio en la Champions League.
Lo mismo ocurre con Francia. A pesar de estar en semifinales, todo lo que respecta al juego de 'Les Bleus' ha sido criticado por la prensa y aficionados, así como un equipo a quien únicamente lo sostienen los resultados. La selección francesa ha marcado únicamente tres goles en la Eurocopa 2024, dos de ellos en propia puerta y otro de penalti. Cifras escasas para un equipo que aspira siempre al título.
La duda ante España: con o sin Antoine
Mil preguntas nacen entonces en torno a la figura del delantero galo. La primera de ellas y por la que se "preocupa" más la Federación Francesa de Fútbol (FFF) es entender por qué su rendimiento ha caído en picado, si es bien por fatiga o exceso de minutos o si bien es por la disposición táctica con la que últimamente Deschamps plantea sus compromisos. Francia alterna entre un 4-2-3-1 y un 4-3-2-1, lo que ha convertido a Griezmann en un jugador polivalente y válido para diferentes posiciones, desde mediocentro ofensivo hasta extremo derecho, pasando por segunda punta o el interior derecho.
Este constante cambio de posición puede tener la solución. Exigido defensivamente sin tener establecido un claro rol en el conjunto, Griezmann parece no encontrar su sitio en el verde. Lo remarcó Jules Koundé tras el partido ante Bélgica: "La importancia de Griezmann atrás cortando líneas de pase ha sido clave". Pero esa posición más ligada al extremo no es la natural del delantero rojiblanco, algo que influye directamente también en su efectividad en el ataque francés.
Sin embargo, a pesar de su falta de atino, Griezmann sigue siendo crucial para el equipo. Este martes Francia vuelve a tener delante una oportunidad única para agrandar la leyenda de una generación de futbolistas única y entre ellos está llamado el 'Principito'. Carente de molestias físicas, más allá del cansancio acumulado y sin lesiones, el delantero parte como favorito para acompañar a Kylian Mbappé y a Marcus Thuram en la punta del ataque contra España.