Los españoles Dani Pedrosa (Honda RC 213 V) y Pol Espargaró (Kalex) y el alemán Sandro Cortese (KTM) serán los encargados de marcar el ritmo de sus respectivas categorías cuando se apague el semáforo rojo en el circuito Rickyard con ocasión del Gran Premio de Indianápolis de motociclismo.

Dani Pedrosa supo defenderse con éxito hasta el final de los ataques de sus rivales en unos accidentados entrenamientos oficiales de MotoGP en los que marcó un 1:38.813 que se convirtió en nuevo récord de vuelta más rápida en el circuito estadounidense, en detrimento de la marca que antes tenía el australiano Casey Stoner y por apenas una décima de segundo de adelanto sobre Jorge Lorenzo, segundo.

Las condiciones del circuito de Indianápolis, con un asfalto defectuoso para la práctica del motociclismo (además de no disponer de un vial de servicio, como en Laguna Seca), ha resultado muy criticado por todos los pilotos y eso pasó factura prácticamente durante todos los entrenamientos.

En Moto3 se produjeron numerosas caídas y hasta tres veces tuvieron que sacar bandera roja desde dirección de carrera para poder asistir a los pilotos.

Después, en MotoGP, poco se tardó en ver lo nefasto del asfalto de Indianápolis, cuando todo un campeón del mundo se estrelló de manera espectacular contra el suelo y, por dos veces, hubo de mostrarse bandera roja.

El australiano Casey Stoner (Honda RC 213 V), que había sido el más rápido al final de las series libres de MotoGP, salió dispuesto a poner cuanto antes tierra de por medio respecto a sus rivales y así fue como en la tercera vuelta marcó el mejor tiempo de entrenamientos (1:39.446), pero en el siguiente giro se fue de manera espectacular por los suelos, mientras que el estadounidense Ben Spies (Yamaha YZR M 1) le quitaba el mejor tiempo al parar su crono personal en 1:39.446.

Su moto resultó dañada y piezas del "carenado" quedaron en mitad de la pista, lo que obligó a sacar la bandera roja a la dirección de carrera unas vueltas después para poder limpiar la misma mientras que Stoner hacía gestos ostensibles de no poder moverse y pedía ser evacuado del trazado por las asistencias médicas.

Más tarde también probaron la dureza del asfalto dos de los americanos de MotoGP, Ben Spies, que pudo acabar los entrenamientos y Nicky Hayden, quien perdió el conocimiento y lo recuperó camino de la clínica del circuito.

No hubo mucho lugar para discusión en Moto2, en donde Pol Espargaró (Kalex) dominó casi desde el principio las pruebas oficiales, como ya había hecho en todas las tandas libres y sólo su compatriota y rival Marc Márquez se pudo acercar a él, si bien lo hizo a poco más de dos décimas de segundo.

La tercera plaza fue para el italiano Andrea Iannone (Speed UP), por delante de un efectivo Julián Simón al que le han gustado mucho los cambios en el chasis de su Suter, como a Nicolás Terol (Suter), que fue décimo.

El alemán Sandro Cortese (KTM) sumó su quinto mejor tiempo de entrenamientos en lo que va de temporada al ser el más de Moto3, en los que el español Efrén Vázquez (FTR Honda) se quedó con las ganas de ocupar ese puesto al mostrarse bandera roja, la tercera, antes de que cruzase la línea de llegada.

Se produjeron muchos incidentes en la única tanda de entrenamientos oficiales de Moto3 pues antes de cumplirse los primeros diez minutos los comisarios de carrera tuvieron que mostrar bandera roja para poder evacuar al español Héctor Faubel (Kalex KTM), quien se propinó un fuerte golpe en la cadera.

Faubel perdió adherencia y al recuperarla bruscamente salió despedido de su Kalex KTM por encima de la moto, lo que le hizo golpearse con fuerza y de espaldas contra el asfalto, algo parecido a lo que le sucedió al australiano Jack Miller, que acabó con la clavícula fracturada o al español Alex Márquez, quien se fue al suelo hasta en tres ocasiones, si bien en su caso no sufrió ningún daño físico relevante.

En los minutos finales Efrén Vázquez tiraba con fuerza para posicionarse y por momentos luchó por el mejor tiempo de entrenamientos, pero la tercera bandera roja de esos entrenamientos le relegó a la séptima plaza cuando luchaba por la primera.