La constructora Odebrecht, responsable por las obras del estadio mundialista de Sao Paulo, aseguró que el accidente que causó dos muertos y dos heridos, no afectará la inauguración del Mundial de 2014, prevista para el próximo 12 de junio.
El ingeniero Frederico Barbosa dijo en una rueda de prensa que la estructura del estadio "no está comprometida" por el accidente, por el que se desprendió parte del techo del estadio. Odebrecht y el Corinthians, propietario del estadio, indicaron en un comunicado conjunto que las obras serán reanudadas el próximo lunes.
El motivo de la paralización fue respetar tres días de luto en homenaje póstumo a los trabajadores fallecidos, Fabio Luiz Pereira, conductor de 42 años, y Ronaldo Oliveira dos Santos, montador de 44 años.
El accidente, de acuerdo con Odebrecht y Corinthians, ocurrió cuando una grúa izaba la última parte de la estructura metálica de la cobertura del estadio y ésta cayó sobre una parte de las gradas y destruyó también una fachada construida con pantallas LED.
El accidente ocurrió a la hora del almuerzo, por lo que la mayoría de los obreros estaba en la cantina y no en horario de trabajo, lo que evitó mayores víctimas.
El mismo procedimiento, según Odebrecht, se había realizado antes con éxito en 37 ocasiones. Según Barbosa, director operacional de la constructora, "lo que causó el accidente las autoridades publicas de Sao Paulo lo van a investigar en los próximos días y después hablarán oficialmente".
El Ministerio Público indicó que visitará el estadio para evaluar la posible paralización de las obras, pues el pasado 29 de octubre el Cuerpo de bomberos detectó 50 irregularidades para otorgar el certificado del proyecto técnico de seguridad contra incendios. La fecha límite establecida por la FIFA para la entrega de las obras de las últimas seis sedes del Mundial es el 31 de diciembre.
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, envió sus condolencias a las familias de los trabajadores, cuya muerte dijo que lamenta "profundamente". "En este momento de dolor envío mis condolencias a las familias de Fabio y Ronaldo", afirmó la mandataria en un mensaje de Twitter. No es la primera vez que ocurren accidentes en las obras de estadios y escenarios que serán usados para el próximo Mundial.
En junio de 2012, en el estadio Nacional de Brasilia, un operario de 21 años murió al caer de una altura de 30 metros, y en marzo de este año, en un accidente similar, un trabajador falleció en el estadio Arena de la Amazonía, en Manaos.
El pasado 15 de abril murió un obrero al caer unas vigas en las obras del estadio Palestra Italia, también en la ciudad de Sao Paulo, pero que no será sede del Mundial.