Tal y como estaba previsto, el pasado lunes 8 de abril se celebró la misa funeral por Fernando Gómez-Acebo. Una emotiva cita que ha vuelto a reunir a los Borbón, que esta vez sí han contado con la presencia del rey Felipe y la reina Letizia. Así, y apenas unas horas después de asistir a la boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo, el rey Juan Carlos y la reina Sofía se han reunido con sus hijas, las infantas Cristina y Elena, y sus nietos Victoria Federica y Froilán, para despedir al primo del monarca, fallecido de manera repentina el pasado 1 de marzo a los 49 años.
Media hora antes del inicio de la misa, programada para las seis de la tarde, comenzaron a llegar familiares y amigos. La infanta Elena acudió con sus hijos, y poco después llegaban en el mismo coche los Eméritos junto a la infanta Cristina. Minutos después, eran el rey Felipe y la reina Letizia quienes hacían acto de presencia en la iglesia catedral de las Fuerzas Armadas de Madrid, también conocida como Catedral Castrense, donde los Gómez-Acebo esperaban a las puertas para recibir a los asistentes.
Una vez todos dentro del templo, el rey Felipe, la reina Letizia, Juan Carlos I y doña Sofía se sentaron en el primer banco para asistir a misa, oficiada por ocho sacerdotes. Una hora después, la familia abandonaba la iglesia a cuyas puertas se ha vivido uno de los momentos más esperados, un afectivo reencuentro público entre la reina Letizia y Juan Carlos.
El inesperado cara a cara entre la reina Letizia y Juan Carlos I
Mucho se ha hablado de la relación entre la reina Letizia y Juan Carlos I. Una relación que, según han desvelado, nunca ha sido buena. De hecho, han sido numerosas las fuentes que incluso aseguran que el Emérito se opuso a que el rey Felipe se casara con la periodista. Así, desde hace años, hemos podido asistir a un claro distanciamiento entre la Reina y su suegro, que demostraría su complicada relación.
Así ocurrió el pasado 27 de febrero cuando la familia real asistió en Londres a la misa en recuerdo de Constantino de Grecia. Una cita tras la que el rey Felipe y Juan Carlos I protagonizaron su primer acercamiento público, abandonando la capilla de San Jorge de Windsor juntos, ante la atenta y seria mirada de la reina Letizia.
Sin embargo, parece que las cosas han cambiado. Así lo hemos podido ver durante el funeral de Fernando Gómez-Acebo cuando, nuera y suegro han protagonizado una imagen insólita. Terminado el servicio religioso, la reina Letizia y Juan Carlos I han mantenido una breve charla tras la que se despedían con dos besos. Una estampa que no veíamos en público desde hacía muchos años, y que demuestra que, al menos ahora, la relación entre ambos es más cercana.
La complicidad de los reyes Eméritos en el funeral de Fernando Gómez-Acebo
Pero este no ha sido el único detalle que ha llamado la atención de este reencuentro de los Borbón. Tal y como comentábamos, el rey Juan Carlos I ha llegado a la Catedral Castrense acompañada de la reina Sofía, con quien horas antes se reencontraba en la boda del alcalde de Madrid. Y si durante el enlace de Martínez-Almeida, los Eméritos se mostraron de lo más cercanos, en esta ocasión también.
Así lo apunta ‘Vanitatis’, que tras desvelar cómo “la reina Sofía se acercó más de una vez a don Juan Carlos, como si n hubiera pasado nada entre ellos” en la boda de Almeida, asegura que en la misa funeral de Fernando Gómez-Acebo, los Eméritos “compartieron confidencias”.
“Quince minutos antes de que llegara el jefe de Estado, hizo su entrada en el templo don Juan Carlos, que recorrió el pasillo central flanqueado por doña Sofía. Una par de veces, y antes de llegar al altar, la emérito le hizo algún comentario” señala el citado portal.
Aunque por un triste motivo, los Borbón han vuelto a reunirse demostrando, una vez más, que tras años de rumores y supuestos problemas familiares, la relación entre ellos se ha vuelto más estrecha, y no dudan en protagonizar momentos de acercamiento como estos.