Faltan tan solo dos meses para que José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo se den el sí quiero en que la que ya muchos consideran una de las grandes bodas del año. Y es que, como era de esperar, en enlace del alcalde de Madrid ha generado una gran expectación. Y no solo porque el rey Juan Carlos sea uno de los invitados a la gran boda del 6 de abril; el romance del político, uno de los solteros de oro de la capital, ha dado mucho de qué hablar.
Así, el pasado 27 de enero, José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo celebraron la tradicional fiesta de pedida de mano. Un evento al que tan solo acudió su círculo más íntimo, y del que no quisieron hacer pública ninguna imagen. Algo que no impidió conocer los regalos de compromiso que se hicieron los novios, un broche familiar y un gran ramo de rosas para ella, y un reloj para él.
Y fieles a las tradiciones, el pasado fin de semana fue la novia quien disfrutó de otra de las celebraciones preboda, su despedida de soltera. Un fin de semana por todo lo alto junto a sus amigas en Milán, que ha dado mucho de qué hablar.
La despedida de soltera de Teresa Urquijo en Milán, dos meses antes de su boda con Martínez-Almeida
Tal y como ha desvelado ‘Vanitatis’, las siete mejores amigas de Teresa Urquijo la ‘secuestraron’ el pasado viernes 2 de febrero para poner rumbo a Milán para celebrar su despedida de soltera. Un fin de semana por todo lo alto en la ciudad italiana del que hemos podido ser testigos gracias a su amiga Luisa Bergel, también íntima de Tamara Falcó, que compartió varias imágenes de su escapada en sus redes sociales.
A su llegada al aeropuerto de Milán, el grupo fue recibido por un chófer que les esperaba con un cartel en el que se leía ‘Teresa Bride to Be’ y con el que Teresa Urquijo no dudó en posar, de lo más sonriente y luciendo un gorro de cowboy que la identificaba como la novia.
Tal y como ha desvelado el citado portal, durante el fin de semana, Teresa Urquijo y sus amigas se alojaron en el penthouse del Be Mate Via Tivoli, uno de los exclusivos establecimientos de la cadena Room Mate en la que trabaja el marido de Luisa Bergel, y cuyo precio se encuentra en torno a los 1.000 euros el fin de semana.
Durante su estancia en la ciudad italiana, el grupo aprovechó para hacer algo de turismo durante el día, reservando las fiestas para la noche. Como era de esperar, una de sus paradas obligadas fue el Duomo, donde Teresa Urquijo y sus amigas posaron para la posteridad.
Tras los planes culturales, llegó la fiesta. La primera de sus paradas nocturnas fue el N´Ombra de Vin, uno de los bares más emblemáticos de la ciudad, donde tomaron una copa antes de poner rumbo a Ronin, uno de los restaurantes asiáticos más famosos de Milán, donde disfrutaron de sus admirados platos, mezcla de la gastronomía japonesa y la mediterránea. Terminada la cena, el grupo de amigas se trasladó al club privado que hay en el ático del hotel, donde brindaron por la novia y por su inminente boda.
Pero según apunta ‘Vanitatis’, la noche no acabó allí. Poco después, Teresa Urquijo y sus amigas se dirigieron a Apophis Club, una de las discotecas de moda del centro de Milán, “donde dispusieron de un reservado para que nadie las molestase presidido por una gran cubitera con botellas para que no tuvieran ni siquiera que ir hasta la barra a pedir”.
Una gran fiesta que terminó a las cinco de la madrugada, cuando el grupo de amigas remató la noche en el apartamento “haciendo bailes de TikTok”. Una despedida de soltera que celebraron por todo lo alto, tal y como harán con la esperada boda.
Así será la gran boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo
Aunque siempre se ha mostrado de lo más discreto en cuanto a su vida privada, José Luis Martínez-Almeida no ha podido evitar que se desvelen numerosos detalles de su boda. Una boda que él mismo confirmó tras días de rumores, y que tendrá lugar el próximo 6 de abril en la finca de El Canto de la Cruz, situada en el municipio madrileño de Colmenar Viejo y propiedad de la abuela materna de Teresa Urquijo.
Pero además, y mientras se desvelan detalles como los conocidos nombres de la lista de invitados, o sobre el vestido de la novia y el traje del novio, hace unos días se confirmaba que la ceremonia religiosa no tendrá lugar en la mencionada finca. Según aseguró ‘Vanitatis’, los novios se darán el sí quiero en pleno centro de Madrid, dejando de lado la discreción con la que hasta ahora han mantenido su boda.
“Lejos de celebrarse intramuros de esta finca de la familia o en la iglesia de alguna localidad cercana, tendrá lugar en pleno centro de Madrid” aseguró el portal, que además, señaló que la ceremonia será “en una conocida iglesia ubicada en el corazón del barrio de Salamanca, en la calle Serrano, que alberga algunos de los templos religiosos más elegidos por la élite política, empresarial y social para celebrar este sacramento”.
