El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) presentó anoche una denuncia ante los Mossos d'Esquadra por el corte de cuatro cables de fibra óptica, y un trozo de 25 centímetros de cable de cobre, que tuvo lugar el jueves en la línea del AVE, según ha confirmado a Efe un portavoz de Adif.
Como consecuencia de la rotura de estos cables, que se localizó entre Vilafranca del Penedès y Gelida (Barcelona), 40 trenes de la línea de alta velocidad y unos 13.000 pasajeros resultaron afectados. La rotura de los cables de fibra óptica afectó a la regulación del tráfico, lo que obligó, por motivos de seguridad, a paralizar todos los trenes que circulaban en Cataluña por la red de alta velocidad.
Los primeros indicios recogidos por los grupos de investigación de los Mossos d'Esquadra apuntan a que el corte de los cables fue un acto de sabotaje, y varias unidades, entre ellas la policía científica y la comisaría de información, trabajan en el incidente.
Desde Renfe se ha señalado que el servicio de trenes funciona con normalidad desde las 16:00 horas de ayer, y que esta mañana el servicio se había iniciado sin incidente.