Antonio Asenjo, exjefe de Seguridad de Iberdrola, dinamita los puentes con la Fiscalía Anticorrupción y amenaza con callarse. El exdirectivo de la energética presentó el pasado viernes un nuevo escrito en la Audiencia Nacional en el que advierte que no prestará declaración el próximo miércoles si el juez Manuel García-Castellón y los fiscales le vuelven a preguntar por las grabaciones del caso.
El motivo, según consta en el escrito al que ha tenido acceso Vozpópuli, es que Asenjo y su representación letrada aseguran que las declaraciones de los pasados 3 y 4 de febrero son nulas. Para empezar, la defensa de Asenjo hace una dura crítica al juez tras recordarle que su representado no fue informado de sus derechos antes de prestar declaración. “Para este letrado, fue toda una sorpresa descubrir que la práctica judicial de ese órgano pasaba actualmente por inatender el derecho más básico de todo investigado: la información de todos los derechos de los que es titular según compareciere por primera vez ante un órgano jurisdiccional”, señala.
En segundo lugar, Asenjo cuestiona la veracidad de las grabaciones del caso y señala que los fiscales quieren convertirlas en la prueba de cargo para acusarle. “No son originales, no se dispone de la grabadora, además, han sido editados, no se dispone de certificaciones o huellas digitales y, en consecuencia, pueden decir lo que se quiera interpretar que dicen que en ningún supuesto (siquiera en una eventual realidad alternativa a la presente en esta nueva existencia cuántica en la que nos vemos inmersos por fuer de una Ley de Cuerdas) pueden ser indicio para la apertura de diligencias o imputación de hechos a investigados, ni mucho menos, prueba de cargo a una imposible condena”, reza el escrito.
Además, el exdirectivo recuerda que en la pieza nº2 del caso Tándem (el caso Iberdrola es la pieza 17), donde se investiga el encargo de un bufete a Villarejo, hay incorporado un informe pericial que apunta a la “nulidad de los archivos de audio, carencia de certificación digital en su volcado por la Policía e inexistencia de los archivos originales de grabación” y otro informe del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil que también acredita manipulación de audios incautados a Villarejo y su socio.
En sus anteriores declaraciones Asenjo sí respondió al contenido de estas grabaciones. ¿Por qué ya no? El propio escrito lo desvela: los abogados de Asenjo y los fiscales del caso han estado negociando una sentencia en conformidad durante todo este tiempo. De ahí que durante estas últimas semanas el exjefe de Seguridad de Iberdrola haya respondido a todas las preguntas que se le han formulado en sede judicial y haya incidido en su disposición a colaborar con la Justicia.
En el escrito, Asenjo afirma seguir dispuesto a colaborar, pero retira la posibilidad de alcanzar una sentencia en conformidad y advierte que solo responderá preguntas que no estén vinculadas a las citadas grabaciones. De esta forma, la defensa del exdirectivo parece querer ‘forzar’ que los fiscales y el juez saquen otras pruebas incriminatorias. La causa permanece bajo secreto de sumario y Asenjo, imputado por presuntos delitos de cohecho y revelación de secretos, ha repetido en varias ocasiones que no sabe en qué se sustenta su acusación.
De hecho, añade que si las grabaciones constituyen la “base indiciaria para la apertura de la pieza separada nº 17 y la llamada a D. Antonio Asenjo Martín como investigado”, el proceso sería nulo y, aunque en ningún momento del escrito pide la nulidad de la causa, sí desliza que no descarta hacerlo más adelante.
Apunta a Olmo
Y en tercer lugar, José Antonio del Olmo. Asenjo carga con dureza contra los fiscales y les acusa de seguir una “doble estrategia” con él y con Olmo, testigo del caso. El también exdirectivo de la casa ya ha prestado declaración y ha presentado un informe interno en el que pone de relieve que Iberdrola diseñó una presunta trama de facturas falsas para abonar los servicios de Villarejo. Según este informe, el presidente Ignacio Sánchez Galán y otros altos directivos estaban al tanto de todo.
Aunque tanto Iberdrola como Asenjo han afirmado que no reconocen la existencia de este informe, Olmo reafirmó ante el juez que el documento es real. Antes de declarar, Asenjo intentó frenar sin éxito su declaración y aseguró a García-Castellón que se trataba de un testigo con una “credibilidad nula”.
Y si Olmo no se apea de su posición, Asenjo tampoco. El exjefe de Seguridad insiste en que Olmo y la Fiscalía han llegado ya a un acuerdo que, según señala, podrá demostrar próximamente, y critica que los fiscales hayan optado por la “aparente realidad” declarada por Olmo en vez de creer su versión. Además, advierte que en un próximo escrito presentará las pruebas suficientes para ‘desmontar’ la versión de Olmo.