Nuevo choque entre acusados y testigos en el juicio del caso Bankia. Esta vez le ha tocado el turno al exdirector de Supervisión del Banco de España Mariano Herrera, que al igual que su 'jefe' Miguel Ángel Fernández Ordoñez, ha señalado a la cúpula directiva de Bankia como los únicos responsables de la salida a Bolsa de Bankia y de la creación del SIP y no lo contrario, como señaló Rodrigo Rato en su declaración.
Este lunes, en la sección cuarta de la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, el inspector ha respondido a la fiscal Carmen Launa a su pregunta sobre quién fue el responsable de la salida a Bolsa y la creación del SIP, que él "entiende" que fueron "decisiones unilaterales" del equipo directivo, que posteriormente fueron aprobadas por el Banco de España.
Herrera ha subrayado que el regulador tampoco vio ningún indicio de problema en las provisiones que hizo el grupo para su creación. "El Banco de España exigía unas provisiones de 8.048 millones de euros y finalmente se dotaron algo más de 10.400 millones", ha explicado el técnico.
El exdirector de Supervisión ha quitado importancia al informe de PwC en el que admitía que el banco tendría que haber realizado unas provisiones de más 11.000 millones de euros, mayor de lo dotado y 3.000 millones por encima de lo exigido por el Banco de España.
2.000 millones de error
Herrera ha explicado que sólo le llegó un informe de "cuatro páginas" muy breve en el que hablaba de estimaciones por pérdidas esperadas, bajo su criterio, incorrecta ya que podría tener un error máximo admisible de un 1%, que en el caso de la entidad suponía unos 2.000 millones de euros por arriba o por abajo.
Herrera ha destacado que el informe realizado por el Banco de España analizaba a las cuatro cajas principales -Caja Madrid, Bancaja, Caja Ávila y Caja de Canarias-, que ostentaban el 90% del peso del nuevo grupo, que todas cumplieron a cierre de 2010. Como consecuencia de este estudio, bajo su criterio era imposible creer que el 10% restante supusiera más de 1.000 millones de euros adicionales.
Por otro lado, Herrera ha destacado que la salida a Bolsa de Bankia con un precio por debajo de lo esperado lo que hacía era beneficiar a los inversores, que tendrían más representabilidad en Bankia, pero que diluía la participación de las cajas, que en un principio querían quedarse con el 70% y que finalmente tuvieron que diluirse hasta el 52%.