La cifra de negocios de Renault en el tercer trimestre del año fue de 11.300 millones de euros, un 1,6% menos que en el mismo periodo de 2018, anunció hoy el grupo automovilístico francés.
A tipo de cambio y perímetro constantes, el descenso habría sido del 1,4%, precisó la empresa en un comunicado.
El grupo vendió 852.198 vehículos en ese período, lo que supone una caída del 4,4%.
Renault indicó que sin tener en cuenta las pérdidas en Irán, el descenso habría sido del 1,8%.
Sus matriculaciones en Europa disminuyeron un 3,4%, hasta los 417.367 vehículos vendidos, así como en América, donde el descenso fue del 1,1%, hasta los 109.543, mientras que en Eurasia subieron un 5,1%, hasta 183.507 unidades.
En África, Oriente Medio y Pacífico la caída fue del 20,0% (99.392 automóviles vendidos) y en China del 15,5% (42.389).
El grupo destacó que, frente al retroceso en Europa, fuera de la región sus resultados fueron mejores que los del mercado global de vehículos, aunque siguen siendo negativos en un 5,4%, con un repunte de ventas en Rusia (6,1%), Brasil (5,6%) o Corea del Sur (11,5%).
"En India, la cuota de mercado creció 0,5 puntos, gracias al lanzamiento de Triber. En al región China, los volúmenes del grupo bajaron un 15,5%, en un mercado que cayó un 5%, en espera del lanzamiento de Nuevo Captur y Renault City K-ZE, el nuevo vehículo eléctrico urbano", señaló.
Crisis interna en Renault
En cuanto a las perspectivas, Renault, que vive una crisis interna desde que su expresidente Carlos Ghosn dimitió por supuestas irregularidades al frente de Nissan, señaló que su cifra de negocios bajará entre un 3% y un 4%, con un margen operacional del 5%, aunque espera que el flujo de caja libre en el segundo semestre sea positivo, "sin garantizar que lo sea en el año completo".
