El juez Alejandro Abascal, del Juzgado de Instrucción número seis de la Audiencia Nacional, considera que existen indicios de que directivos de DIA borraron el ordenador del anterior consejero delegado, Ricardo Currás, al que se le investiga por presunta manipulación contable en las cuentas de la cadena de supermercados.
En un reciente auto, en el que cita como investigados a los miembros del anterior comité de auditoría de la compañía, el juez explica que habiendo solicitado las comunicaciones entre Currás con KPMG en relación a la elaboración de los informes de auditoría del ejercicio 2017 y 2018, la representación legal del grupo español no ha podido presentarlas.
Según ha declarado la defensa de DIA, dichas comunicaciones "fueron objeto de eliminación y borrado de
los dispositivos electrónicos que DIA puso a disposición del Sr. Currás para el desarrollo de sus funciones".
El juez requiere a KPMG, EY, y PwC los trabajos realizados para DIA sobre las irregularidades contables detectadas
También la consultora EY, que ha elaborado un informe sobre los hechos investigados, a petición del que fuera presidente de la comisión de auditoría de la empresa, Borja de la Cierva, indicaba en el mismo que cuando un directivo de DIA deja la compañía "el departamento de Seguridad de la Información procede suspender su usuario de correo, bloqueando su acceso".
Dicho borrado se producía siempre una vez transcurrido un mes desde la baja del directivo o empleado, a no ser que la dirección solicitara expresamente que no se hiciera, por parte del departamento de Seguridad de la Información.
El juez apunta en su auto que la salida de Currás de DIA se produjo el 24 de agosto, del año 2018, pero que el borrado de su ordenador portátil y de los servidores de la compañía se produjo el 16 de septiembre.
"Existe el indicio que personas de la dirección de DIA querían que se borrase el correo del anterior Consejero Delegado", dice el juez
"Tal hecho", señala el magistrado, "que no ha podido ser explicado ni por DIA, ni por el responsable de seguridad de la información (en cuanto quién dio la orden para que no se respetase el mes)", resulta "más significativo" teniendo en cuenta que Antonio Coto fue nombrado consejero delegado del grupo DIA el mismo día 24 de agosto, y que, nada más llegar al cargo "impartió órdenes para que se efectuase un forecast ajustado a la realidad tal y como han puesto de manifiesto todos los directivos y empleados que han declarado en sede judicial".
Por todo ello, concluye el juez, "no podemos dejar de poner de manifiesto que existe el indicio que personas de la dirección de DIA querían que se borrase el correo del anterior Consejero Delegado así como lo que pudiese guardar en su ordenador".
PwC, EY y KPMG
Tres de las cuatro grandes firmas del sector de la consultoría mundial -PwC, EY, y KPMG- han trabajado para DIA en los últimos años.
KPMG auditó las cuentas del grupo durante 27 años, hasta que fue sustituida por EY, en 2019. Y tanto PwC como EY han sido contratadas por DIA para hacer informes sobre las presuntas irregularidades contables detectadas y por las que se investiga al grupo.
El juez Abascal requiere ahora más documentación a las consultoras. En su último auto, el magistrado incluye como diligencia que se oficie a PwC para que remita los trabajos realizados por el encargo que se le hizo desde DIA en 2019, y también del personal de la consultora que elaboró esos informes.
Y da dos días a KPMG y a EY para que presenten escrito informando "de las causas del retraso en la remisión de la información que les fue requerida, así como para que manifiesten el plazo previsible dentro del cual la remitirán".