La sostenibilidad energética pasa por una mayor capacidad de generar energías renovables y hacer un uso más eficiente de las mismas. Un cambio de modelo en clave de eficiencia energética que parece especialmente necesario en un momento en el que el planeta entero se enfrenta a grandes desafíos climáticos y marcado por el hartazgo ciudadano por las continuas subidas del precio de la electricidad de los últimos meses.
En ese marco, las soluciones tecnológicas y la sensibilización ciudadana en materia de ahorro energético se antojan como las grandes claves para acelerar la transición hacia un nuevo escenario energético más sostenible.
Para hablar de todas estas cuestiones, Vozpópuli ha celebrado un encuentro debate en el que diversos expertos en la materia han intercambiado impresiones acerca de esta nueva agenda sostenible para la energía.
“La mejor energía es la que no se consume”, dijo en la apertura del debate Luis Cabrera, presidente de ANESE. El máximo representante de las empresas de servicios energéticos en España señaló que nuestro país tiene mucho margen de mejora en cuanto a eficiencia energética, y recordó los ambiciosos objetivos de descarbonización que marca la UE a través de sus directivas. “Tenemos que ser capaces de generar una eficiencia energética por encima del 30% en los próximos diez años.” El reto es “lograr que mucha de la energía que se está consumiendo de manera innecesaria o ineficiente deje de consumirse o se consuma de una manera mucho más eficiente”, añadió.
¿Qué factores pueden favorecer ese proceso? Guillermo Escobar, profesor de Eficiencia Energética de la EOI, cree que se trata de una combinación de “capacidad, marco normativo y educación”. Respecto a este último factor, este docente sostuvo que “tanto la ciudadanía como las instituciones públicas y privadas están cambiando el chip y poniendo a la sostenibilidad y la eficiencia energética en primera línea de batalla”.
En ese cambio de mentalidad, sin embargo, Javier Avendaño, gerente de Desarrollo de Servicios Energéticos de ACCIONA Energía, apuntó que el foco no debería ponerse únicamente en las energías renovables. En su opinión “renovables sin eficiencia energética no sirve para nada. Tan importante como que la energía que se genere sea lo más verde posible, es que aguas adentro del contador se optimice al máximo el kilovatio/hora”. Este experto también se refirió a la sensibilización como un factor primordial en este cambio. “Si no conseguimos convencer al consumidor, nunca vamos a llegar a alcanzar los objetivos de sostenibilidad y descarbonización que nos están marcando”, advirtió.
Las soluciones tecnológicas y la sensibilización ciudadana en materia de ahorro energético se antojan como las grandes claves para acelerar la transición hacia un nuevo escenario energético más sostenible
Por su parte, Hugo Lucas Porta, jefe de Comunicación y Relaciones Institucionales del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), puso el acento en el impacto que la eficiencia energética tiene “no solo desde un punto de vista medioambiental, sino también bajo un prisma socioeconómico”. El representante de este organismo adscrito al Ministerio para la Transición Ecológica recordó que los análisis del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima hablan de una posibilidad de creación de entre 250.000 y 350.000 empleos a final de década o de un incremento del PIB del 1,8%. “Más competitividad para la industria y más dinero en el bolsillo del ciudadano” son para este experto otras de esas derivadas económicas del cambio de modelo.
Javier Avendaño (Acciona). Hugo Lucas Porta (IDAE).
La cuestión tecnológica
Digitalización e innovación juegan un papel fundamental en esta transición, especialmente en cuanto a su capacidad para acelerar un proceso para el que hay unos plazos muy ajustados. “La tecnología nos permite ir más rápido”, resumió Javier Avendaño. Sobre la accesibilidad de esos desarrollos que hagan posible la transición ecológica, Luis Cabrera indicó que “la tecnología ya está disponible y es asequible. Ahora tenemos que se capaces de implementarla”.
Hugo Lucas Porta resaltó la oportunidad que, en su opinión, la transición energética representa desde el punto de vista tecnológico. “La transición energética está innovado a un ritmo muy superior al de cualquier otro sector y sus tecnologías se encuentran ahora en un momento de crecimiento exponencial en el que cada nueva innovación es el germen de la siguiente”, afirmó. Respecto a cuál debe ser el papel del Gobierno y las Administraciones en la introducción de estas tecnologías, el director de comunicación de IDAE lo ilustró con la metáfora del palo y la zanahoria. “Regular contra las tecnologías que se quiere sacar del mercado porque son más contaminantes, e incentivar con ayudas a aquellas otras para las que se busca su penetración”.
Renovables
Las energías renovables se antojan como la principal apuesta de cara la consecución de los objetivos de sostenibilidad. Hugo Lucas Porta estima que España se encuentra en una posición inmejorable en cuanto a la evolución de su implantación. “Tenemos regulación, actores en toda la cadena de valor, financiación a través de distintos instrumentos y contamos, a coste cero, con los recursos naturales: el sol, el viento, y una biomasa por aprovechar”.
Un optimismo que es compartido por Javier Avendaño. “Las renovables en España van muy bien. Más del 50% de la energía total que se ha consumido en España en 2021 ha sido generada con renovables”, confirmó. Como principales retos pendientes, el responsable de Acciona Servicios Energéticos comentó: “que se conozcan otras opciones de renovables más allá de la planta fotovoltaica o el molino, y se impulsen más proyectos de renovables dentro de los hogares de los consumidores”.
La transferencia de las tecnologías renovables a los hogares de los particulares es uno de grandes retos pendientes
De hecho, la transferencia de estas tecnologías a las casas particulares es, según los ponentes, el siguiente gran reto a afrontar. Más, tras conocerse los nuevos planes de rehabilitación y las partidas de ayudas (entre ellas, 10.700 millones de los Fondos Next Generation EU solo para energía) disponibles. “Los números salen. Pocas cosas van a ofrecer un mejor retorno que una inversión de energía renovable en una casa. Ya no hay excusa para no planteárselo”, zanjó el presidente de ANESE. Un diagnóstico con el que coincidió Avendaño: “Cualquier inversión en eficiencia energética tiene un retorno asegurado porque estás generando un ahorro”.
Eso sí, aun se necesitan más elementos para que se de esa tormenta perfecta del cambio de modelo. Y uno de ellos es el cultural. El profesor Guillermo Escobar insistió en el que el camino ya ha comenzado. “Hace cinco años nadie sabía que yo trabajaba en algo llamado eficiencia energética. Hoy el debate está en la calle y todo el mundo habla de ello”.