Casi dos millones (1,8 millones de euros) por realizar, entre otros menesteres, los correspondientes actos protocolarios del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif). Así viene recogido en el Boletín Oficial del Estado del pasado 27 de enero, del que ha tenido conocimiento este medio a través de cuadros de la compañía pública indignados con la información. Un contrato bien remunerado que ha despertado una creciente indignación en Adif, especialmente tras consumarse el ERE las pasadas Navidades.
Según el BOE, Adif, empresa del Grupo Fomento presidida por Gonzalo Ferre, contrata “servicios para diseño, realización y asesoría de comunicación de eventos, presentaciones y actos protocolarios en la Dirección de Comunicación”. El acuerdo abarca 24 meses (dos años, 900.000 euros por ejercicio) y un tercero prrogable, y la presentación de candidaturas vence el próximo 17 de marzo.
Adif responde
En Adif, en cambio, defienden que el último contrato protocolario era de 2,8 millones, un 56% más. "Además, se primarán las condiciones económicas antes que las técnicas. Podemos asegurar que no ha salido nada caro si se compara con sus precedentes". La dirección ferroviaria y representantes de Fomento alcanzaron estas Navidades un acuerdo con los principales sindicatos para hacer un ERE voluntario y universal sobre 250 trabajadores. Según las fuentes consultadas por Vozpópuli, el Expediente de Regulación de Empleo de Adif ya está prácticamente cubierto, mientras que el de Renfe Operadora está a punto de firmarse.
“Irán a parar a algún amigo”
Por estas razones estos contratos sientan mal incluso entre miembros la cúpula directiva. “Seguramente son 1,8 millones que irán a parar a manos de algún amigo”, critican en la empresa. Encargada del mantenimiento y de la construcción de las vías, Adif fue dividida en dos el pasado 13 de diciembre mediante un apaño contable que evitó que la deuda del AVE contabilizara como déficit público (1,5 puntos del PIB). Ahora coexisten Adif Alta Velocidad y Adif Red Convencional por imposición de Cristóbal Montoro. Y la firma estatal prevé cerrar este año con una deuda superior a los 16.500 millones, números que no casan con el despilfarro contractual del departamento de Comunicación.
Por otro lado, durante estos días se ha producido la llegada de la nueva directora de Recursos Humanos de Adif, Sara Ugarte. Anunciado por este medio hace dos meses, el nombramiento también suscitó una fortísima controversia: Ugarte era directora de RRHH en la Agencia Tributaria cuando ocurrió el escándalo de Hacienda con la infanta Cristina, en el que un supuesto error con el DNI de la hija del Rey provocó que se le atribuyeran “erróneamente” 13 fincas. Los directivos de la Agencia Tributaria, Ugarte incluida, cesaron a raíz de esa equivocación, pero Montoro les garantizó una salida digna. Por lo que se ve, esa salida pasa por hacerles un hueco en algunas empresas públicas.