Technokontrol es una empresa radicada en Olot (Girona) que nada tiene que ver con los casinos, los hoteles y demás parafernalia relacionada con Eurovegas; su negocio, dice, son los sistemas de prevención de incendios y explosivos. Sin embargo, parece decidida a intentar sacar tajada del macroproyecto de ocio y casinos de Sheldon Adelson en Madrid.
En las últimas semanas, la empresa, bien de forma directa, bien a través de su administradora única, Laura Cañada Sierra, se ha afanado en registrar 25 empresas que utilizan la palabra "Eurovegas" en su denominación social. También ha pedido a la Oficina de Patentes y Marcas (OEPM) el registro de 16 marcas denominaciones comerciales relacionadas con ese proyecto.
El movimiento llega, presumiblemente, en vista de que el magnate judío todavía no ha movido un dedo para registrar en España los derechos comerciales del faraónico proyecto que, se supone, impulsará en el municipio de Alcorcón (al sur de Madrid), aunque oficialmente no está decidido que, si se lleva a cabo, finalmente el complejo se llame Eurovegas.
Entre las empresas constituidas por Laura Cañada están Sands Madrid, SL, Eurovegas Spain Internacional SL, Eurovegas Golf & Leisure SL y Eurovegas Sand, SL. Entre las marcas, hay algunas tan expresivas como “Lo que pasa en Eurovegas se queda en Eurovegas”, “Eurovegas donde los sueños se hacen realidad”, “Sands Madrid”, “Eurovegas Casinos & Resorts” y “”Eurovegas Golf”, por citar unas pocas.
Según el diario Expansión, que el pasado miércoles avanzaba la hiperactividad emprendedora de Cañadas, Las Vegas Sands, la empresa de Adelson, ha aclarado que la directiva de Technokontrol “no guarda ninguna relación con el proyecto”.
Tras estos trámites, que no son gratis (la empresa habría destinado a ellos unos 90.000 euros), la directiva (con la que no ha sido posible contactar) se ha ido de vacaciones fuera de España, quizá con la esperanza de que su teléfono suene uno de estos días y al otro lado de la línea esté un portavoz de Adelson dispuesto a pujar por esas denominaciones y marcas.
Sin embargo, un portavoz de Technokontrol niega que la empresa esté detrás de esos trámites. Dice que es “un tema que lleva directamente” Laura Cañadas, en tareas de “consultoría” para terceros, y “por razones de confidencialidad con el cliente” no facilita más información. Sin embargo, es la propia Technokontrol, y no Cañadas, la que ha iniciado los trámites ante la OEPM.
Por otro lado, y según reconoce abiertamente en conversación telefónica otro directivo de la empresa, el movimiento persigue exactamente lo que parece: negociar con Adelson la propiedad de esos derechos comerciales.
"Ahora hay que esperar", dice el directivo de la firma. Esta, asegura, ya ha tenido éxito en el pasado mediante artimañas similares frente a gigantes como Walt Disney o la productora cinematográfica Dreamworks, que no obstante esta fuente rehúsa precisar. La empresa, aclara, se dedica a comercializar “sistemas antiexplosivos”.
Technokontrol buscaría así dar un pelotazo en toda regla aprovechando que, en principio, Adelson no ha llevado a cabo una protección previa sobre la marca Eurovegas. Expertos en propiedad industrial dudan, sin embargo, que la empresa gerundense tenga éxito en su estrategia porque, pese a no estar registrada aún, Eurovegas sería una marca notoria notoria y vinculada a Las Vegas Sands.
En cualquier caso, de prosperar la artimaña, sería un auténtico logro para Technokontrol, una empresa con un objeto social un tanto ininteligible (“Fabricación, venta, distribución y comercialización de láminas inhibidoras de la explosión de vapores de fluidos inflamables así como los cuerpos de relleno en forma de bolas y mallas de metales comunes semielaborados”, según el Registro Mercantil), que tiene un teléfono de contacto (un 902) que desde hace una semana nadie atiende y que presume, según su web, de contar con un generador “capaz de generar energía absolutamente limpia 100% dado su carácter electromagnético, super eficiente e ilimitada y absolutamente gratis en su generación”. El negocio del siglo.