La sociedad resultante de la fusión Iberia-British, IAG, registró un beneficio neto de 1.484 millones de euros durante los nueve primeros meses del año, lo que supone un incremento del 25,8% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.
El beneficio operativo antes de partidas excepcionales de IAG se situó en 1.915 millones de euros hasta septiembre, con un crecimiento del 6,1% respecto a los nueve primeros meses de 2015, según ha informado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La cifra de ingresos de la aerolínea alcanzó los 17.272 millones de euros, lo que representa una mejora del 0,9% con respecto a los nueve primeros meses de 2015, cuando ingresó 17.119 millones de euros.
El consejero delegado de IAG, Willie Walsh, ha asegurado que la compañía ha registrado unos "sólidos" resultados en el tercer trimestre, con un beneficio de las operaciones de 1.205 millones de euros antes de partidas excepcionales.
Las operaciones han alcanzado un beneficio de 1.205 millones de euros antes de partidas excepcionales.
"Aunque el desempeño fue sólido, estos resultados se vieron afectados por un difícil entorno operativo con un impacto negativo de los tipos de cambio muy significativo de 162 millones de euros, debido principalmente a la debilidad de la libra esterlina y a las continuas interrupciones operativas provocadas por las huelgas de controladores aéreos", ha señalado.
Asimismo, ha recordado el pago, anunciado este pasado jueves, de un dividendo a cuenta de 11 céntimos de euros por acción, un incremento del 10% respecto al año anterior. "Al igual que en el ejercicio 2015, esperamos que el dividendo a cuenta sea aproximadamente la mitad del dividendo anual", ha afirmado.
A los niveles actuales del precio del combustible y tipos de cambio, IAG espera obtener un beneficio de las operaciones de 2.500 millones de euros para el año completo y no se ha producido ningún cambio significativo en las condiciones de mercado a corto plazo.