Belén Romana percibirá una remuneración de 500.000 euros anuales como presidenta del banco malo. La ex directora del Tesoro, nombrada el pasado jueves en la Comisión Rectora del FROB, tendrá funciones ejecutivas, por lo que no se designará a ningún consejero delegado, según fuentes de Economía. Además de Romana, el FROB designó a Walter de Luna, responsable en España y Portugal de ING Real State Finance, como Director General de la Sareb. Su retribución tampoco podrá exceder de 500.000 euros.
El sueldo de Romana y de Luna está topado por la limitación impuesta en el Real Decreto del pasado febrero sobre saneamiento inmobiliario en el que se limita las retribuciones a los directivos de las entidades con ayudas públicas, según explican en Economía. El decreto de febrero establece un máximo de 600.000 euros para los primeros directivos de las entidades con ayudas públicas y de 300.000 euros para los presidentes en los que el FROB tenga derechos políticos.
La designación de Romana y de Luna tendrán que ser ratificada por el futuro consejo de administración de la Sareb que se constituirá cuando esté clarificada su composición accionarial.
En este sentido, la gran banca va moviendo ficha en cuanto a su participación en el banco malo. Una día después de que se conociese la negativa de BBVA, el Santander ha decidido ser la primera entidad en confirmar que se convertira en accionista de la Sareb. El resto de entidades que han recibido la invitación de Economía aún no han tomado una decisión definitiva, aunque, con toda probabilidad, tanto La Caixa, Sabadell como el Popular también invertirán en este instrumento.
La sequía de inversores extranjeros ha obligado a Economía a poner en marcha un plan con cinco bancos de inversión internacionales
Como ha informado hoy este medio, las entidades tienen de plazo hasta final de esta semana para comunicar al Banco de España y Economía cual va a ser su intención acerca de la participación en el banco malo. Las negociaciones, sin embargo, continuarán en los próximos días para preparar la reunión que mantendrán banca sana, Economía, Banco de España y el Frob el próximo 30 de noviembre.
En un primer momento, con la transferencia de los activos tóxicos de la banca nacionalizada, la aportación privada a la Sareb será de 2.200 millones, de los que 550 millones se desembolsarán en capital a cambio de acciones. El resto se cubrirá mediante la adquisición de deuda subordinada emitida por la Sareb con una rentabilidad anual del 8%, siempre que este instrumento genere beneficios, situación que no se prevé en sus dos primeros años de vida. Mientras, las entidades nacionalizadas recibirán deuda senior emitida por el FROB a cambio de sus activos con una rentabilidad similar a la financiación del Estado en sus plazos.
Economía también quiere involucrar al mundo asegurador en el accionariado del banco malo. "Tenemos 34 aseguradoras en España con potencial para invertir", aseguran fuentes de Economía.
El reparto final de la carga del capital y de los riesgos no se decidirá hasta conocer si Economía logra que BBVA pueda cambiar de opinión y acompañe al resto de la banca sana en el accionariado del Sareb. En este sentido, fuentes de BBVA señalaron ayer que la "decisión final aún no está tomada. No se tomará ninguna decisión que afecte la rentabilidad de los accionistas, de la entidad ni de las empresas en las que el banco tiene participación".
Además de inversores españoles, Economía tiene especial interés en incorporar inversores internacionales al capital de la Sareb, y pretende que aporten al menos 500 millones de euros, aunque todavía no tienen ningún compromiso de inversión. A este respecto, fuentes del Economía han asegurado que el lunes se pondrá en marcha un plan con cinco bancos de inversión para mejorar los contactos con potenciales inversores extranjeros ante la sequía de compromisos.
Lograr esa cifra por parte de los inversores sería bueno para dar credibilidad al proyecto, pero no es imprescindible para que el 'banco malo' pueda funcionar porque "el proyecto está asegurado".
El banco malo se constituirá el próximo 30 de noviembre como Sociedad Anónima con un capital social inicial de 60.000 euros. La transferencia de los activos de las entidades nacionalizadas no se efectuará hasta que haya entrado capital privado.