Algunos expertos señalan que la amnistía fiscal del Gobierno ha dado un nuevo impulso a las sociedades de inversión de capital variable. Otros explican que algunos inversores acaudalados han encontrado la forma de canalizar sus inversiones ante la falta de oportunidades corporativas o de otra índoles. E incluso los hay que señalan que el boom de sicav de los últimos meses se debe sobre todo al interés de las entidades financieras por ofrecer una inversión 'personalizada' a cambio de las comisiones que conlleva gestionar este tipo de vehículos.
Lo cierto es que desde hace tiempo, las sicav se han vuelto a poner de moda entre los inversores, como demuestra el número de sociedades constituidas en los últimos meses y el patrimonio bajo gestión global que mantienen. Durante el segundo trimestre de este año, han alcanzado ya la cifra de 30.625 millones de euros, sumando 1.314 millones a la cifra con que cerraron el trimestre anterior, según los datos de Inverco.
Un pastel muy goloso para las entidades financieras, que se encuentran inmersas en una lucha soterrada por ganar cuota de mercado. Algunas firmas están apostando fuerte por el segmento de banca privada y eso se deja notar al final en el crecimiento patrimonial de las sicav que gestionan. Bankinter es, con diferencia, la entidad que más incremento de activos bajo gestión ha experimentado, pasando de los 1.908,5 millones que mantenía a cierre de marzo a los 2.116 millones con que ha terminado junio. Es decir, ha acumulado 208 millones de euros en este período de tiempo.
BBVA y Banco Sabadell son otras dos de las principales entidades del país que han visto aumentar el patrimonio global de sus sicav. La primera ha acumulado 162,3 millones de euros durante el segundo trimestre, hasta situar la cifra de activos en 3.268 millones de euros; mientras que la segunda ha experimentado un crecimiento de 158 millones más, hasta conseguir 1.647,7 millones de euros de patrimonio en sus sociedades de inversión de capital variable.
Santander y Bankia han sido las únicas firmas del grupo de grandes entidades que ha visto disminuir el patrimono de sus sicav. Durante el segundo trimestre ha perdido 85,5 millones de euros, hasta quedarse en 4.390,5 millones de euros a cierre de junio, según los datos de Inverco. A pesar de esta rebaja, la gestora de banca privada de Banesto ha sido la excepción, con un aumento de ocho millones de euros, hasta 197 millones de activos bajo gestión. Bankia, por su parte, ha pasado de gestionar 365,6 millones en marzo a 346 millones el final del segundo trimestre.
El resto de entidades ha vivido un aumento patrimonial desigual en sus sicav, desde los nueve millones de La Caixa (1.174 millones a final de junio), los 12 millones de Banco Popular (595,4 millones), los tres millones de Kutxabank (318 millones) o los 1,4 millones de Ibercaja (72,9 millones).
Esta lucha de las firmas por atraer clientes de banca privada también se está experimentado entre las firmas de tamaño medio o independientes. Un claro ejemplo es Banca March, que rivaliza con Bankinter en crecimiento patrimonial de sus sicav, con un aumento de 205 millones más durante los últimos meses, hasta colocar el volumen de gestión de activos de sus sociedades en 2.618,7 millones de euros.
