El alquiler, la pesadilla de todos los jóvenes. El nuevo paradigma que se ha instaurado desde principios de 2023, creado un escenario que genera incertidumbre y que deja en estado de coma a prácticamente toda la ciudadanía. Unos sueldos congelados, una subida del IPC que deja temblando los bolsillos de los españoles y una situación económica que deja entrever la incertidumbre que se avecina, son algunos de los factores que hacen que el futuro a nivel nacional este repleto de dudas e incógnitas.

Las noticias que anuncian mes a mes el Gobierno siguen con la tónica general de este año y parece que dar un giro de 180 grados será tarea ardua. Durante el mes de julio, el precio del alquiler ha subido un 0,9% en julio respecto al mes pasado, hasta situarse en 11,9 euros el metro cuadrado, según el último informe de precios publicado por Idealista. Para hacernos una idea, en este trimestre se ha incrementado el precio del metro cuadrado un 3,7%, siendo el récord histórico de la aplicación líder del sector inmobiliario.

¿Qué consecuencias ha tenido el aumento descontrolado del precio del alquiler? En primer lugar, que la edad media de emancipación suba hasta los 30 años. Una cifra que es muy significativa, ya que nunca se había superado el umbral de los 30 y que habla muy mal del futuro al que se deberán enfrentar los jóvenes de nuestro país. Dos caras de la misma moneda. Unas cifras del paro que dan una aliento, una bocanada de aire fresco para los pulmones financieros de nuestro país, pero que no se ven reflejados en la calidad de vida.

Ante dicha dualidad, la Administración ha querido tomar cartas en el asunto y tratar de dar la vuelta a la tortilla. La manera más efectiva para erradicar la precariedad y las pésimas condiciones de los más jóvenes es ofrecer un paquete de ayudas que estén a la altura y que auxilien directamente a la economía de los menores de 35 años. Y es que, los jóvenes de entre 18-35 años son el rango más damnificado por la subida del coste de vida.

Ayudas para el alquiler: el bono joven de alquiler y el Plan Estatal de Ayuda a la Vivienda

El bono joven de alquiler y el Plan Estatal de Ayuda a la Vivienda, los dos pilares de las ayudas para hacer frente al alquiler. A medida que han pasado los meses de este 2023, el Gobierno empezó a percatarse de los puntos calientes donde tenía que inyectar ayudas para frenar en seco un problema que se le estaba yendo de las manos.

Su primer intento desesperado de hacer frente al tema del alquiler fue el bono joven de alquiler, una ayuda creada por y para que los más jóvenes tuvieran una ayuda extra y así promover la emancipación fuera de los brazos de los padres.
Una cuantía de 250 euros que aunque no llegue para cubrir la totalidad del alquiler, sí que aporta otro ingreso más para hacer frente a los gastos mensuales. Ahora, no es todo de color de rosas. Aunque miles y miles de personas se encuentren contra las cuerdas, esta subvención no está disponible para todos y hay que cumplir estos requisitos para poder optar a ella que se explican en el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana:

• Hasta 600/euros//mes
• Hasta 300/euros//mes si el alquiler es de una habitación
• Hasta 900/euros//mes o 450/euros//mes en alquiler de habitación, previo acuerdo de la Comisión de Seguimiento. Compatible con Plan Estatal. Hasta el 40% de la diferencia entre el alquiler de la vivienda y la ayuda del Bono Alquiler Joven, con el límite conjunto del 75% de la renta del alquiler.

El punto clave de todo este enclave de requisitos es el que abre la puerta a la posibilidad de combinar el bono joven de alquiler con el Plan Estatal. Aquí es donde realmente se crea todo un nuevo abanico de opciones que da la opción a muchos jóvenes a percibir una ayuda que cubra hasta el 75% de la cuantía del alquiler. Esto se debe a que si sumamos los 250 euros del bono joven de alquiler más, en el mejor de los casos, los 600 euros extras del Plan Estatal de Ayuda a la Vivienda, si que se llegaría a cubrir tres cuartas partes de lo que hay que depositar a final de mes para tener un techo.

Unas ayudas que alivian la vorágine de incertidumbre que habían marcado el inicio de 2023 y que deja entrever un haz de luz al final del túnel. Eso sí, todas estas subvenciones son parches temporales. Hay todo un trabajo que realizar para que el tema del alquiler en España se rebaje, se implante un equilibrio del mercado y que poco a poco el poder independizarse deje ser un beneficio de pocos y pase a ser una posibilidad real para todos los jóvenes de nuestro país.

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