“SPAIN-GERMANY SPREAD FALLS BELOW 250 BPS, 1ST TIME SINCE 2011. Spanish retriement fund buying everything in sight to prove all is well”. Es decir, el Gobierno está usando el Fondo de Reserva de la Seguridad Social para rebajar el tipo de interés de la deuda y ofrecer así la sensación de que es el mercado quien apoya a España, sus reformas y sus datos económicos.
Lo dice la publicación ZeroHedge a través de su cuenta de Twitter, un portal financiero muy seguido por profesionales del mercado financiero y que habitualmente muestra un tono crítico, rozando el sarcasmo, con la información. De hecho, su lema es “en una línea de tiempo lo suficientemente larga, la tasa de supervivencia para todo el mundo se reduce a cero”. Sin embargo, es una publicación muy seguida por gestores de cartera y traders, especialmente porque está muy al día en el capítulo tecnológico y envía información en tiempo real sin coste a cada lector suscrito.
La publicación pretende denunciar un uso aparentemente indebido del fondo de reserva de las pensiones, que estaría comprando deuda con el dinero público ahorrado para complementar las pensiones en caso de necesidad, buscando rendimientos políticos.
Sin embargo, esta acusación tiene mucho de demagógico, ya que es algo lógico que el fondo de la Seguridad Social invierta en deuda española. También puede hacerlo en la de otros países, con un rating mínimo y todavía no está desarrollado el polémico reglamento anunciado en tiempos de Pedro Solbles, cuando se dijo que este instrumento de previsión, creado en tiempos de José María Aznar, podría tomar alguna posición en renta variable.
1.000 millones
El pasado mes se supo que este fondo utilizó 1.000 millones de euros para apoyar el pago de pensiones contributivas, con lo que su saldo total quedaba en 59.307 millones de euros. En 2012 fueron retirados otros 7.000 millones.
Lo que realmente parece haber de fondo en este estrechamiento de prima de riesgo (hoy se colocaba por debajo de los 250 puntos, con el bono español en el 4,36% y el alemán en el 1,88%) es la retirada de dinero del bund alemán, que en los últimos años ha sido prácticamente el único activo libre de riesgo de la Eurozona. A eso hay que añadirle la previsible reducción de los estímulos monetarios, sin desdeñar que los últimos datos macro españoles (balanza por cuenta corriente, comercial e incluso empleo) han aportado, al menos, una leve chispa esperanzadora.
El propio ministro de Economía, Luis de Guindos, dejó claro a principios de año que en el Gobierno esperaban un diferencial que rondara los 200 puntos básicos. Sin duda, desde el Ejecutivo calculaban que eso llegaría por el retorno de flujos desde Alemania a las deudas en origen y que ello tendría el positivo impacto que se está viendo ahora.
Pero en EE UU avisan que hay maniobras políticas detrás. El tiempo será, una vez más, quien deje claro qué hay detrás de este estrechamiento de diferenciales que está teniendo lugar tanto en España como en Italia.