Pedro Sánchez ha entrado en campaña con un guiño a los pensionistas, a los que les ha prometido que incluso si no logra ser investido presidente y no consigue formar Gobierno, buscará alguna vía legal para poder subir las pensiones más del 0,25% que actualmente estipula la ley.
Esta es una de las preocupaciones principales de los sindicatos: el hecho de que las pensiones se verían abocadas a revalorizarse únicamente un 0,25% en 2020 si no hay en España un Gobierno que disponga de herramientas para evitarlo (aprobando un real decreto, por ejemplo, como ocurrió en 2018), y así se lo han trasladado este jueves a Sánchez los líderes de CCOO y UGT, que urgen al presidente en funciones a que se siente ya a negociar con Unidas Podemos para evitar nuevos comicios.
Legalmente un gobierno en funciones no tiene instrumentos ni capacidad para evitar que se cumpla le legislación vigente: la que aprobó el Gobierno del Partido Popular en 2013 y que dicta que las pensiones públicas subirán sólo un 0,25% mientras los ingresos del Sistema de Seguridad Social no aumenten lo suficiente como para costear su incremento anual, es decir, mientras el Sistema siga en déficit.
Esta circunstancia no ha evitado, sin embargo, que la ministra de Trabajo en funciones, Magdalena Valerio, haya prometido públicamente este jueves "que el PSOE velará por los pensionistas".
"Quiero tranquilizar a los pensionistas de este país, el Gobierno que espero que llegue a formarse y el PSOE velará porque las pensiones suban según el IPC y para que haya un ajuste con el IPC real", ha proclamado desde la tribuna de la Moncloa, después de mantener encuentros con los agentes sociales.
Una forma de pedir el voto
Según ha reconocido el líder de UGT, Pepe Álvarez, en privado Valerio les ha confesado que en caso de no poder formar Gobierno explorarán las vías legales posibles para subir las pensiones, pero el mensaje ha sonado electoralista incluso para el secretario general de CCOO, Unaí Sordo, que ha recodado que "la legislación es la que es y un Gobierno en funciones no tiene capacidad en esta materia", dando fuerza a su petición de que lo importante es negociar y no prometer.
La titular de Trabajo ha ido aún más allá en sus guiños a los pensionistas y ha señalado que, en caso de que se celebren de nuevo elecciones, aún habría tiempo de revertir la subida del 0,25% si de las urnas sale un resultado con una mayoría más fuerte para el PSOE que le permita a Sánchez formar Gobierno con más rapidez y actuar antes de que acabe el año.
"Ahora mismo sólo tengo en la cabeza una sola posibilidad: que haya Gobierno y que Pedro Sánchez sea investido presidente. Ahora bien, en el hipotético caso de que haya elecciones aún habría tiempo", ha señalado.
Cómo se ha evitado el 0,25% en 2019
Para que las pensiones pudieran subir en 2019 según el IPC, el Gobierno aprobó un Real Decreto Ley en diciembre, acordado con Unidas Podemos, que contemplaba una subida de las pensiones generales del 1,6% para 2018 y 2019 y de un 3% para las mínimas y las no contributivas.
Este decreto emplazaba al propio Gobierno a encontrar en un plazo de seis meses un mecanismo adecuado que garantizara la revalorización de las pensiones cada año sin que los pensionistas sufrieran una pérdida de poder adquisitivo, tal y como ha recordado la agencia Efe, pero ese periodo expiró sin que se consiguieran avances.
A priori, parece que todos los partidos políticos están de acuerdo en que las pensiones deben subir según la inflación, ya que -a excepción de ERC- todos los grupos que constituían la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo (antes de que Unidas Podemos la dinamitara) habían consensuado la segunda recomendación, que preveía la actualización de la pensión con el IPC real.