Santander será el principal beneficiado por la inédita decisión de Metrovacesa. El comité ejecutivo de la promotora española con mayor volumen de suelo ha propuesto a sus accionistas repartir la más grande cantidad de dividendos desde su regreso a bolsa en 2018 en plena incertidumbre sobre el mercado residencial, una decisión que tendría al banco cántabro como gran favorecido.
La entidad que preside Ana Botín ha hecho valer su 49% en la promotora para arrancar hasta 78 millones de euros de dividendo -el doble que en diciembre del 2021- pese a los vientos de parón del mercado de los que la propia inmobiliaria -e incluso, el mismo banco- han alertado a los inversores.
El maná de dividendos tendrá como precio el incremento del endeudamiento de la compañía, de un 5,9% de LTV -mora sobre sus activos- a un 12%, "que continúa siendo un endeudamiento muy prudente, y uno de los más bajos de su sector, tanto en España como en otros países de la UE", según remarcan desde la promotora, si bien su equipo directivo ha incidido en que la actual propuesta de dividendos responde al deseo del accionariado que encabeza el Santander.
Tras la OPA de FCC, Metrovacesa sumará en siete meses 250 millones en dividendos, por los 172 millones que había repartido en los cuatro años anteriores
En los primeros nueve meses del año, los ingresos de Metrovacesa crecieron un 5% -hasta los 352 millones- y el resultado bruto de explotación o ebitda, un 16% -hasta los 32 millones-. En ese tiempo, la promotora consumó la preventa de 1.341 viviendas, un 14% menos que en el mismo período de 2021, con un precio medio de 323.000 euros por vivienda, un 16% por encima del año anterior. La compañía acumula preventas de 3.047 unidades, el 95% de las que permitirían cumplir el objetivo de 2022, el 75% para 2023 y más del 50% de las correspondientes a 2024; además, tiene 287 millones en caja.
Santander aprovecha antes del parón y la operación FCC
Según apuntan fuentes del sector, los planes del Santander para con Metrovacesa tienen ahora un ojo puesto en el tercer accionista, FCC Inmobiliaria, quien ha incrementado ostensiblemente su posición en la compañía este año.
La propuesta de reparto de hasta 159 millones de euros de dividendos que deberá aprobar la Junta de Accionistas del próximo 29 de noviembre ha conseguido ya elevar el valor de la acción -más de 10%, hasta los 1070 millones- y favorecer la posición del Santander de cara a nuevos movimientos de la constructora controlada por una de las mayores fortunas del mundo, la del mexicano Carlos Slim.
La OPA de Slim la pasada primavera buscó, con cierto éxito, 'limpiar' la inmobiliaria de accionistas minoritarios y allanar el camino para un marco más favorable y flexible tanto para FCC como para el primer accionista de Metrovacesa, el Santander
Y es que, según han remarcado fuentes próximas a ambas compañías, la OPA de Slim la pasada primavera -por hasta el 29%, quedándose finalmente con el 17%- buscó, con cierto éxito, 'limpiar' la inmobiliaria de accionistas minoritarios y allanar el camino para un marco más favorable y flexible tanto para FCC como para el primer accionista de Metrovacesa. Informantes del sector han dado cuenta de contactos bilaterales entre las partes, si bien ambas han preferido no hacer comentarios oficiales.
Fuentes del mercado apuntan ahora a una nueva embestida de FCC para la que el Santander estaría preparándose. Fue de hecho la propia entidad presidida por Ana Botín la que prestó a la constructora un aval por 262 millones de euros para su oferta en primavera, con un crédito puente de hasta 283 millones -a devolver en un año- para financiar la operación. Tras la OPA de FCC, Metrovacesa sumará en siete meses 250 millones en dividendos, por los 172 millones que había repartido en los cuatro años anteriores.
Las sinergias entre Santander y la compañía de Slim
La familia Slim buscaría aunar su objetivo de obtener mayores sinergias con Metrovacesa con la necesidad del Santander de sortear un agujero en su balance por la compañía que ahora controla al 49,4% con un descuento en la acción de alrededor del 50% sobre el valor de los activos.
El Santander -que también comparte accionariado con Slim en el multimedios Prisa- no estaría cerrado a llegar a un acuerdo con FCC sino que está dispuesto "a soltar lastre" siempre que sea bajo sus condiciones, según han incidido dos fuentes cercanas a las partes.
La empresa a través de la que Slim controla a la constructora busca con Metrovacesa "reforzar su presencia en el sector inmobiliario" de España y "consolidar un grupo inmobiliario sólido y de gran dimensión
Sobre los hipotéticos términos de la relación entre el Santander y FCC, las posibilidades giran en torno a un preacuerdo sobre un precio superior por acción para el banco; una eventual fusión de Metrovacesa con la división inmobiliaria de FCC y/o su participada y patrimonialista de oficinas y viviendas Realia de la que la entidad cántabra pueda beneficiarse a corto o largo plazo -por ejemplo, vendiendo activos por separado por su valor de tasación-; la exclusión de bolsa en genérico con ulteriores ventas de activos; y operaciones entre el grupo de Slim y otras compañías inmobiliarias en España participadas por el banco que preside Ana Botín.
En palabras de FCC a la CNMV, Control Empresarial de Capitales, la empresa a través de la que Slim controla a la constructora, busca con Metrovacesa "reforzar su presencia en el sector inmobiliario" de España y "consolidar un grupo inmobiliario sólido y de gran dimensión, con mayor eficiencia de gestión derivada de las sinergias operativas y financieras que permiten aprovechar las oportunidades de crecimiento del sector; diversificar el riesgo y la presencia de FCC Inmobiliaria en la geografía española al ampliar su actividad a nuevas zonas de operaciones en las que no se encontraba presente; e incrementar notablemente la contribución de la actividad recurrente de patrimonio en renta de Realia y Jezzine (alquiler de inmuebles de Caixabank) en el conjunto de FCC Inmobiliaria".