“Nos mostramos estupefactos y preocupados”, confiesan los sindicatos de Alcoa en una carta remitida a la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto. Este conglomerado formado CCOO Industria, FICA-UGT, FI-USO, CIG y la Confederación de Cuadros y Profesionales protesta porque consideran que el Gobierno les ha dado la espalda en la defensa de la fábricas de aluminio de Alu Ibérica de A Coruña y Avilés, las plantas que Alcoa vendió el pasado julio a Grupo Parter.
"El Secretario General de Industria Raúl Blanco, que preside la Mesa, no asistió por problemas de agenda, convocada de forma urgente por el propio Ministerio el pasado jueves 11 de junio, dejando sin contenido, ni sentido la reunión", denuncian en su carta los sindicatos. La Mesa Industrial se creó con el objetivo principal de garantizar la continuidad de las fábricas para garantizar el empleo de las fábricas y el de miles de trabajadores que viven de los servicios auxiliares en las comarcas en las que se encuentran situadas.
Los sindicatos también protestas porque consideran que el Ministerio de Industria ha cambiado de estrategia "y no reconoce su responsabilidad y supervisión en el proceso, con la implicación y compromiso de resolución manifestado por la ministra. "Se ha trasladado la responsabilidad a los trabajadores", añaden. La venta de las fábricas a Parter Capital se realizó, hace justo un año, después de un complicado proceso supervisado y auspiciado por el Ministerio de Industria, la Xunta de Galicia y el Principado de Asturias.
En el acuerdo de venta se establecía una cláusula de garantía de empleo pata todos los trabajadores y trabajadoras y por 24 meses. El pasado jueves no asistieron tampoco a la Mesa Industrial ni Alcoa, ni Parter Capital, firmantes del Acuerdo de Compraventa de las fábricas en el que se garantizaba el empleo, en julio de 2019, invitadas por el Ministerio de Industria para aclarar la situación.
"Nos mostramos estupefactos y preocupados porque el Gobierno de España no sea capaz de recabar la información, ni la presencia de quienes pueden aclarar los términos de una operación industrial que se lleva negociando desde septiembre de 2019, con absoluto sigilo, y aprovechando para anunciarla momentos de desconcierto causado por la pandemia del Covid-19 y como podría afectar al futuro de las plantas y su empleo", declaran en su misiva los sindicatos.
Duda de la solvencia
Todos los miembros de la Mesa Industrial han puesto en duda la solvencia económica y técnica de Grupo Industrial Riesgo (GIR), actuales propietarios del 75% y administradores únicos de las fábricas de Alu Ibérica. Esta circunstancia, así como, las noticias conocidas por medios de comunicación en los que se aluden a presuntas estafas cometidas por los propietarios de GIR hacen necesaria una investigación liderada por el Ministerio de Industria que supervise la operación realizada, así como a los actuales propietarios de Alu Ibérica.
"Desde el 6 de mayo en la que fue convocada la Mesa Industrial, en la que se puso de manifiesto todos los riesgos y dudas acerca de la operación realizada, hasta hoy, el Ministerio de Industria no ha avanzado NADA", concluye el argumentario de su reprobación.