Orange España ha registrado su primer periodo anual con crecimiento en ingresos. El operador facturó 4.698 millones de euros en España en 2023, lo que supone un 1,1% más que los 4.647 millones de euros que obtuvo en el ejercicio precedente, así como el primer aumento anual de su cifra de negocio en el país desde 2018, según los resultados presentados este jueves por la compañía.
La operadora facturó 1.894 millones de euros por sus servicios paquetizados, un 1,3% más que los 1.870 millones de euros de 2022, mientras que por los servicios móviles supusieron 782 millones de euros (-1,01%), al tiempo que los ingresos por los servicios fijos se situaron en 457 millones de euros (+4,81%).
Los ingresos mayoristas alcanzaron los 793 millones de euros, un 9,68% menos que en 2022, la venta de equipos supuso una cifra de negocio de 711 millones de euros (+12,5%) y los servicios de tecnologías de la información generaron 58 millones de euros (+41,46%).
Así, la facturación de Orange en España supuso el 10,64% de los ingresos del grupo francés, que el pasado ejercicio se situaron en 44.122 millones de euros, mientras el beneficio bruto de explotación después de arrendamientos fue de 1.246 millones de euros, lo que supone un 12,2% más que los 1.111 millones de euros del año anterior.
En cuanto al número de clientes, en 2023 Orange tenía 21,65 millones de usuarios, un 3,5% más en términos interanuales, con 17,71 millones de usuarios de servicios móviles y 3,93 millones de banda ancha fija.