El inicio del cuarto trimestre se ha teñido de rojo para el Ibex 35 que ha cerrado la jornada de hoy con pérdidas del 2,26% hasta los 8.353,8 puntos, lastrado por los temores respecto a Grecia y la rebaja de Fitch para la previsión de crecimiento de España en 2012 (hasta el 0,5% desde el 1,6% anterior).

El país heleno ha hecho saltar de nuevo las alarmas tras reconocer que no podrá cumplir con sus objetivos de reducción de déficit. Atenas admitió que el agujero presupuestario alcanzará el 8,5% este ejercicio, dejando atrás el objetivo perseguido por el Banco Central Europeo, la Comisión Europea y el FMI del 7,6%. Estas dudas sobre la viabilidad del rescate, que coinciden con la auditoría de la “Troika” para desactivar el sexto tramo del rescate a Grecia, han desatado una nueva oleada bajista en los principales mercados europeos, que se dejaban de media un 1,50%.

Aunque las pérdidas en el Ibex 35 se han mantenido durante toda la sesión, los picos de volatilidad se registraron con la apertura de Wall Street, que agudizó las caídas por debajo del nivel de los 8.300 puntos. Gracias a unos datos de ISM Manufacturero y de gasto en construcción mejores de lo esperado en Estados Unidos, el mercado español lograba remontar.

Desde el punto de vista empresarial, Bankia ha debutado hoy en el selectivo español con caídas del 1,64% de media, por encima del resto del sector bancario. Ebro Foods lideró las alzas con subidas del 3,31% coincidiendo con la entrega de su dividendo. OHL fue el peor valor con una caída del 3,85%. Por su parte, la prima de riesgo española bajó hasta los 331 puntos, animada tras las compras de deuda italiana por parte del BCE.