España sigue a la cola de la Unión Europea en materia de innovación, por detrás de Italia y Portugal, y avanza a un ritmo más lento que la media comunitaria, al igual que Grecia, según un estudio publicado este martes por la Comisión Europea.
En concreto, España ocupa el puesto número 19 de los Veintisiete en el ranking de innovación de la UE, lo que supone la bajada de un escalón respecto al año anterior.
Dentro de la clasificación en cuatro grupos que realiza Bruselas, España está encuadrada en la tercera división, entre los denominados "innovadores moderados", junto con República Checa, Grecia, Hungría, Italia, Malta, Polonia, Portugal y Eslovaquia.
Pero mientras que Malta y Portugal son los dos países que más crecen dentro de este grupo, España y Grecia se sitúan entre los que menos mejoran sus resultados.
Las principales debilidades de España en materia de innovación son la escasa inversión de las empresas en I+D (la cuarta más baja de la UE, sólo por delante de Grecia, Eslovaquia y Lituania), el escaso registro de patentes y marcas y la falta de innovadores.
Los puntos fuertes, según Bruselas, son la existencia de un sistema de investigación abierto y atractivo y el apoyo del sector público. España ha experimentado un fuerte crecimiento en el gasto en innovación no relacionado con I+D, el registro de marcas y las exportaciones de servicios intensivos en conocimiento.
En contraste, la evolución es negativa en cuanto a inversión privada en I+D y los efectos económicos de la innovación.
Los líderes en innovación de la UE son Suecia, Dinamarca, Alemania y Finlandia. La segunda división la ocupan Bélgica, Reino Unido, Países Bajos, Austria, Luxemburgo, Irlanda y Francia, todos ellos por encima de la media comunitaria.
Finalmente, las últimas posiciones del ranking europeo de innovación corresponden a Rumania, Lituania, Bulgaria y Letonia.
Casi todos los Estados miembros han mejorado sus resultados de innovación. Sin embargo, según ha advertido el Ejecutivo comunitario, la mejora de estos resultados se está ralentizando y la UE no reduce el persistente desfase que existe con los líderes mundiales de la innovación, es decir, Estados Unidos, Japón y Corea del Sur. El problema, según Bruselas, sigue hallándose en la innovación en el sector privado.
La UE mantiene una clara preponderancia sobre las economías emergentes de China, Brasil, la India, Rusia y Sudáfrica. Sin embargo, China está mejorando sus resultados de innovación y está ganando terreno progresivamente.
"Si queremos eliminar el desfase existente respecto de nuestros principales socios económicos y superar la crisis actual, debemos prestar la máxima atención a la innovación. En particular, cuento con las empresas, ya que han demostrado ser la clave del éxito en la innovación", ha dicho el comisario de Industria, Antonio Tajani.