La exportavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) y promotora de la plataforma Guanyem Barcelona, Ada Colau, sostiene que Cataluña y España "pueden, por supuesto, vivir en el mismo edificio". Y lo que es más: "Incluso pueden compartir piso. De hecho, ahora mismo Cataluña y España nos llevamos muy bien, son los políticos los que intoxican esa vecindad".
La activista, en una entrevista concedida al diario 'El Mundo', define al presidente de la Generalitat, Artur Mas, como "más de lo mismo y menos de lo que queremos" y dice sobre el líder de Podemos, Pablo Iglesias, que "en sus manos está que acabe bien o mal". "Vivimos en una sociedad mediática y si eso se pone al servicio del colectivo estará bien, pero si acaba en personalismo o caudillismo estará mal", zanja al respecto. Y añade: "¡Ni hablar de dejarme coleta! Yo, pelo corto".
Preguntada por si no es incoherente querer desahuciar a los políticos, Colau responde que "hay que desahuciar a quien no quiere satisfacer las demandas de una mayoría social. Estos viven bunkerizados". Hilando un poco más fino y con el ejemplo de Iñaki Urdangarin de por medio, la que fuera portavoz de la PAH no se corta: "Jaja... No cumple con nuestros protocolos: deudor de buena fe y primera y única vivienda. Y no me da pena, se ha forrado a costa del resto".
"Urdangarin no me da pena, se ha forrado a costa del resto", dice Colau
A lo largo de la entrevista, en un tono distendido, Colau reivindica una mayor transparencia y control ciudadano defendiéndose cuando le preguntan por "¿cómo es eso de ser antisistema dentro del sistema?": "Pregúntaselo a los bancos y al PP, que son lo más antisistema que hay. Se saltan las reglas cada día".
Colau concluye 'repartiendo leña' a Messi, por "ofender al país cuando no paga impuestos", a Soraya Sáenz de Santamaría, por "su mala hostia... La recuerdo con las lágrimas de cocodrilo por los niños desahuciados", y a Alfonso Rojo. Sobre este último, quien llamó "gordita" a la activista y dijo que tenía "126.000 piojosos seguidores en Twitter", se limita a destacar que "dejó clara su altura... o mejor anchura moral: ofendió a millones de personas".
Finalmente, termina confesando que su madre trabaja en una inmobiliaria. "Trabaja como comercial. Con un sueldo muy humilde, viviendo de alquiler, por cierto. No tiene ninguna inmobiliaria como se ha dicho".