Los aludes y la nieve mantienen cortadas cuatro carreteras en la provincia de Huesca y por la crecida extraordinaria del río Ebro se han cortado otras tres en la ribera alta en la provincia de Zaragoza.
En Huesca está cortada la carretera local HU-631 a la altura de Fanlo, desde el kilómetro 5 al 13; la A-139 a la altura de Benasque desde el km 66 al 72; la A-2606 entre Panticosa y Baños de Panticosa y la A-135 a la altura de Torla.
En la provincia altoaragonesa es obligatorio el uso de cadenas en la A-136 desde Sallent de Gállego a la frontera del Portalet y además está prohibida la circulación de camiones, autobuses y articulados, vehículos que tampoco pueden circular por la HU-611 a la altura de Panticosa por pavimento deslizante.
La niebla también complica la circulación en la carretera N-II desde el kilómetro 394,4 en Peñalba al 430 en Fraga.
Inundaciones por la crecida del Ebro
Debido a la inundación de la calzada por la crecida del Ebro, están cortadas las carreteras provinciales CP-002 a la altura de Novillas, desde el kilómetro 16,5 al 20,2; la CP-003 a la altura de Pradilla de Ebro, desde el km 6,9 al 7,6, y la A-127 a en Gallur, desde el kilómetro 0 al 1,4.