La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, ha advertido hoy que irá a los tribunales contra cualquier persona que frene la ampliación norte del Puerto de Valencia "por criterios políticos y no técnicos. Valoramos adoptar cualquier acción legal y llegaremos hasta el final".
Catalá, que ha realizado estas declaraciones en la previa de la celebración de la Asamblea de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, ha insistido en que: "No vamos a tolerarlo. Todas las Administraciones públicas valencianas, la Generalitat y las tres Diputaciones vamos a una en esta defensa".
Ha seguido así la estela del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, quien en la jornada de ayer advirtió que, de acceder Sánchez a estas presiones, la estrofa del Himno Regional de la Comunidad Valenciana que dice 'valencianos en pie alcémonos' "se va a quedar corta para lo que vamos a montar aquí".
Las administraciones no pueden boicotear un proyecto de infraestructuras por simple voluntad política y, si lo hacen, podrían prevaricarMaría José Catalá
"Las administraciones no pueden boicotear un proyecto de infraestructuras por simple voluntad política y, si lo hacen, podrían prevaricar", ha explicado la primera edil, al tiempo que ha afirmado estar "muy preocupada" por el hecho de que esta paralización del puerto que han pedido ERC y Junts, como adelantó Vozpópuli, "esté sobre la mesa de negociación de una investidura o posible investidura de Pedro Sánchez".
En la pasada legislatura, según ha aseverado la alcaldesa de Valencia, "a pesar de que había informes técnicos positivos por parte del Ministerio se quedó paralizada la ampliación en el Consejo de Ministros por motivos políticos".
Compromís, PSOE y Sumar
La alianza del exalcalde de Valencia Joan Ribó con la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, fue la que metió en el cajón la aprobación por parte del Consejo de Ministros que debería haber estado lista en el primer trimestre de este año.
La coincidencia entre los técnicos del Ministerio y de la Autoridad Portuaria de Valencia de la validez de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) realizada en su día para la ampliación norte del Puerto de la capital del Turia no hacía presagiar que la luz verde del Consejo de Ministros se demorara.
Compromís siempre ha defendido que tiene que hacerse una nueva DIA y cuando hubo que tejer una alianza para las elecciones generales la cuestión de la paralización de la ampliación del puerto se consolidó de manera definitiva.
El PSOE, por su parte, defiende que se debe ejecutar esa ampliación pero los equilibrios políticos dentro del Gobierno le impiden imponer su criterio.
Los valencianos no se arrodillan
Ante este panorama de incertidumbre, Catalá ha recalcado que "ahora, tenemos una sospecha muy clara de que ERC y Junts han puesto esta condición de paralización" y avanza que "el pueblo valenciano no se arrodilla ante nadie".
María José Catalá ha defendido que "haya una competencia en condiciones de igualdad entre el Puerto de Barcelona y el Puerto de Valencia" y así "si se invierte en el Puerto de Barcelona que se invierta en el de Valencia; y si se autoriza la ampliación del Puerto de Barcelona que se autorice también la del Puerto de Valencia".
Fuentes creíbles
Ahora bien, entiende que "poner piedras en el camino al Puerto de Valencia para favorecer al de Barcelona y someter al pueblo valenciano a los deseos de un grupo político minoritario para una investidura me parece lo más grave que puede vivir este pueblo".
Preguntada por la credibilidad que le otorga a esta "agenda oculta" desvelada por Vozpópuli, Catalá ha afirmado que "las fuentes por las que nos ha llegado esta cuestión consideramos que tienen credibilidad y nos preocupa mucho que esta cuestión esté sobre la mesa".
